La autora, referente feminista del Frente Popular Darío Santillán Corriente Plurinacional, afirma que “si no existiera el FITU, si no existiera Myriam Bregman” y las diversas experiencias colectivas de lucha popular, “habría que inventarlas”. Un texto cálido, lleno de vida cotidiana, desde una mirada socialista y desde abajo.
Martes 10 de octubre de 2023 15:15
Fotos ContrahegemoníaWeb
“No busqué una vida acomodada, ni tampoco una vida tranquila. Por eso elegí la lucha. Vivir en la hora de los resignados, de los acomodados, de las conveniencias, no es vivir. Es solamente vegetar y transportar en forma ambulante una masa de carne y huesos. A la vida es necesario brindarle la elevación exquisita, la rebelión del brazo y de la mente” - Severino Di Giovani, 1931 (1)
“Si no existieran tendríamos que inventarlos”; esta frase jocosa la he repetido muchas veces, cuando me conmueven acciones, colectivas, movimientos combativos.
El Waly me imita riéndose alocadamente; valorando sus presencias en las luchas desde las izquierdas y desde abajo…
En estos días especiales, contradictorios pero apasionados, como vienen siendo; digo, decimos “si no existiera el FITU, si no existiera Myriam Bregman, Vilca, Natalia, Luana, la Lore, la Negra, Vanina, María, Romina, La Izquierda Diario y tantos otrxs, habría que inventarlos”.
Si no existieran las asambleístas en defensa de los cerros, los territorios, el agua, los mares, “habría que inventarlos”.
Si no existieran las pibadas y las ancestras que salimos el 28 de septiembre por la ESI , por alertas de leyes que no se cumplen y encima nos amenazan con vulnerarlas, “habría que inventarlas”. Y así podría seguir con el Malón, los paros antiburocráticos, los actos de derechos humanos, las paredes llenas de murales combativos…
Los lunes, en los laburos, en casas familiares, en grupo de amigxs, aparecía el tema del fútbol, las cargadas… Escucho con alegría esas pasiones, aunque a mí no me pasa, siento que las vivo desde afuera.
Estos lunes, luego de los clásicos futboleros y de los debates presidenciales televisivos, tengo uno de esos días que me sonrío sola por lo que escucho y leo, hechos de la vida cotidiana…
No voy a ponerme a hablar de los medios de comunicaciones hegemónicos o de comentaristas, porque eso es fácil de chequear, lo que dicen o callan, por diversos intereses.
Tengo ganas de compartir pequeñas anécdotas, de los Nicos que se preguntan en las redes “¿cuánta gente escuchó el debate?” Y se responden, “si no hubiese estado la izquierda dando debates, planteando posiciones, no hubiesen escuchado hablar de Julio López, de los 30.000 y fue genocidio, de Santiago Maldonado, de la lucha del pueblo jujeño, de las que mantienen la educación pública que son las docentxs”.
El de la quesería, que ya me tiene ubicada, comienza a reírse cuando me ve y me dice “¿qué te pareció lo del gatito mimoso?”… y es un pibe que no vota a la izquierda históricamente, no sé qué pasará ahora, pero para mí no tiene ninguna importancia. Esto le manifiesto al pibe, lo sorprendo y sigo, queremos decir que no nos resignamos, que la historia de derechos humanos es presente y futuro, que somos felices y activas porque luchamos… Suerte para el pibe que no lo siguiera acosando, porque se empezó a hacer cola por los descuentos. Me dice “si venís mañana que no hay ofertas, no viene ni el loro”.
Comienzo pilates, estoy para atrás con el cuerpo endurecido, y escucho en personas que no conozco que rescatan cómo La Rusa les paró el carro a todxs. “Son impresentables”, dijo la maestra jubilada, “me da vergüenza ajena”.
Me conmuevo cuando leo en el Face que “Teresa la que nació presa”, la Tere Laborde, la hija de la Adriana Calvo, a quien vimos en la primavera antifascista en Ciencias Exactas de la UNLP ; dice “voten a sapos para que no entre el gatito mimoso con el poder. Yo voto a Myriam Bregman porque es de izquierda y coherente”. Se me caen lagrimones de lo conmovedor que son estos puentes, entre la hija de nuestras compas y esta actualidad, que si no tienen estas pasiones; caemos en los dolores, en los miedos, en las resignaciones”.
Andrea, Chana y otras comparten el pronunciamiento de feministas por Palestina libre, contra las ocupaciones, contra el racismo a los pueblos; y recuerdo el temblor de alegría que nos produjo la voz de la izquierda solidarizándose con los pueblos agredidos y no con sus verdugos históricos. El resto de lxs participantes sumándose con las respuestas occidentales cómplices de la OTAN, de gobiernos fascistas.
Qué bueno y estimulante que lleguen videos de pueblos catalanes, vascos y de otros territorios con banderas palestinas, visibilizando las realidades de ocupaciones históricas.
Volviendo al principio… ¿Tiene importancia qué porcentaje de votos va a sacar la izquierda en octubre? Ojalá saquemos muchos, que toda esa gente sensible, con ganas vote a estas propuestas, que no se deje ganar por votar al menos malo, como hace unos cuantos años se viene haciendo. Es importante que tengamos legisladorxs, consejalxs en todos lados; está garantizado con ellxs dignidad, participaciones activas, honradez, coherencias, acuerpamiento con laburantes, estudiantes, pueblos originarios, mujeres y diversidades sexuales, ciencias dignas, educaciones populares, denuncias, resistencias internacionalistas.
Aunque me maten por lo que digo, y me sonrió pensando en la cara de alguna cumpa, aunque no saquemos porcentajes altos, las jugadas apasionadas ya están hechas, la dignidad de vivir austeramente -como vive el pueblo avasallado por el capitalismo patriarcal racista- no hay posibilidad de destruirla.
Ya ganamos, no solamente en números, si, en proyectos, en ganas, místicas, unidades, coordinaciones, juntadas… Que no decaiga, la seguimos…
Celina Rodríguez Molina es referente feminista del FPDSCP y de la Cátedra Libre Virginia Bolten (UNLP/Feministas del Abya Yala)
Artículo originalmente publicado en Contrahegemonía Web
(1) Severino Di Giovani. Periodista, poeta, obrero anarquista. . América Scarfo fue su compañera de militancia y de vida. Lucho contra el fascismo. Formo parte de la Campaña por Sacco y Vanzetti contra la pena de muerte estatal.