Lo confirmó Alberto Maceira, director del Hospital, en una entrevista a Perfil. La terapia intensiva del Hospital Posadas ha llegado a su máxima capacidad con un incremento de 1000% de los casos confirmados.
Viernes 24 de julio de 2020
Luego de los anuncios del gobierno de Alberto Fernandez al comienzo de la cuarentena, donde mostraban una terapia nueva equipada con más de 70 camas con la posibilidad de ampliarse, la realidad demostró que la falta de planificaciones por zona, de testeos masivos y de aislamiento planificado derivó en el colapso del Hospital nacional.
Esta realidad demuestra el futuro bastante más incierto al resto de las instituciones sanitarias que son más pequeñas y que tienen menos recursos en la zona oeste del conurbano.
El director del #HospitalPosadas reconoce que las camas UTI están 100% ocupadas. Es urgente un Impuesto a las grandes fortunas para mayores recursos a la salud pública, la centralización y reorganización del sistema sanitario.
— Nathalia Gonzalez (@NathiGonzalezS) July 24, 2020
Por otro lado, esto evidencia que los 125 días de cuarentena fueron sin otro plan para afrontar el avance de los contagios, donde tampoco se utilizaron todos los recursos necesarios para equipar hospitales.
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Entre las fuentes consultadas, los principales problemas que se planean, además del aumento superior al 1000% de casos de Covid-19 con complicaciones, se le suman los pacientes crónicos, que al no tener un seguimiento en sus tratamientos terminan desarrollando patologías de alta complejidad que derivan en la imprescindible asistencia vital que solo puede ofrecer una cama de terapia intensiva y su respectivo equipo de trabajo.
Además, esas patologías preexistentes, comienzan a agravarse en medio de una crisis que empuja a millones a la pobreza y a la más absoluta precariedad. Si a esto le sumamos los peligros del contagio por Covid, estamos frente a una situación altamente compleja, de la cual los trabajadores de la salud pública, que llevan meses de agotamiento, con salarios mal pagos, con varios empleos, y muchas veces sin protocolos adecuados, deben hacerse cargo.
La solución que hasta ahora han deslizado algunas autoridades es comenzar a utilizar las camas de internación de la terapia pediátrica: esta situación sería inédita y aumentaría la carga de trabajo del equipo de pediatras y de enfermeras especializadas, además de agrandar la guardia respiratoria de adultos con alrededor de 4 camas con ventilación asistida pero con una infraestructura bastante precaria.
Pero para comenzar a descomprimir los hospitales públicos, como venimos denunciando desde la Agrupación Marrón, se deben pensar planes que impliquen la unificación de todo el sistema de salud público y privado, la eliminación del pluriempleo con salarios que igualen la canasta familiar y garantizar equipos de trabajo completos contratando a los residentes de todos los últimos años. El monitoreo constante de camas disponibles de terapia por zona y un robusto sistema de derivaciones, dejando de lado pasos burocráticos que exigen las obras sociales y prepagas, con todas las ambulancias existentes disponibles para tal fin.
Hospital Posadas:
100% de camas ocupadas (70)
300 trabajadores contagiados
Se necesitan medidas de emergencia:
Por un sistema de salud unificado y presupuesto para salud en base a un impuesto a las grandes fortunas pic.twitter.com/gMWuI3lIRd— Jorgelina Esteche (@EstecheJor) July 24, 2020
Para evitar el colapso total del sistema de salud, es imprescindible un aumento del presupuesto de emergencia. Por eso la banca del Frente de Izquierda presentó el proyecto de gravar a las grandes fortunas con un impuesto que garantice esta inyección de recursos sumado a un IFE de 30.000 pesos para las 11 millones de familias que lo han solicitado. Sumado ala centralización del sistema de salud público y privado, para que se pueda asegurar la atención sanitaria a todo paciente que lo demande, garantizando, la disponibilidad de camas de internación, las ambulancias y todos los recursos necesarios para la atención médica.
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En la pelea por estas demandas y las propias del sector, desde la Agrupación Marrón seguimos proponiendo poner en pie comisiones de seguridad e higiene en todos los hospitales, que permita no solo pelear organizados, sino darle forma a esa distribución que hasta ahora no han garantizado ni el gobierno nacional, ni el provincial o los municipales. De la mano de aquellos que siempre estamos dispuestos a proteger a sus pacientes, y todos los equipos que conforman al personal de salud, están las vías para garantizar una salud pública verdaderamente de calidad.
Frente a esta alarmante situación en la que nos encontramos los trabajadores del Hospital Posadas, donde al 23 de Julio ya son más de 300 trabajadores positivos de covid-19 y más de 1200 estuvieron en aislamiento, tenemos que exigir que se nos garantice un testeo a todos los trabajadores del hospital para garantizar nuestra salud y la salud de los pacientes con los que trabajamos día a día.
Sabemos que esta situación en la que nos encontramos no es ajena al resto de los trabajadores de la salud. Por eso, queremos impulsar en Agosto un plenario nacional de salud, donde entre todos los trabajadores podamos discutir las condiciones en las que nos encontramos trabajando, y así organizarnos para exigir por nuestros derechos. Y acompañado de esto organizar una gran marcha donde podamos confluir con todos los trabajadores que hoy se encuentran siendo suspendidos o despedidos en medio de la pandemia, como los trabajadores de LATAM que vienen peleando por sus puestos de trabajo, con los jóvenes precarizados que se vienen organizando por sus condiciones de trabajo, los que son obligados a ir a trabajar sin ninguna medida de seguridad, porque sus reclamos son también nuestros reclamos.
Somos los propios trabajadores y trabajadoras las que podemos poner en pie protocolos y medidas de seguridad e higiene que garanticen nuestra protección y la de nuestras familias.