Se juntaron varios pibes y pibas precarizades en Lugano para intercambiar y debatir sobre sus condiciones de trabajo y cómo la crisis una vez más golpea fuerte a la juventud precaria
Martes 3 de noviembre de 2020 17:57
El sábado 31 de octubre se realizó una asamblea de pibas y pibes convocada por la Red de Precarizadxs en la rotonda de Castañares y Escalada, en el barrio de Lugano. Se llevó a cabo al aire libre y con los recaudos sanitarios correspondientes. Se intercambió y debatió sobre la crisis social y económica que viene afectando de manera especial a los sectores populares y a la juventud precarizada.
Después de la asamblea, La Izquierda Diario se acercó a elles para hacerles algunas preguntas para saber, por ejemplo, qué piensan del accionar de la policía en los barrios.
Alejandro (22), albañil igual que su padre, respondió: “Yo vivo hace 22 años en la villa y siempre es lo mismo, es violencia, maltrato, te piden el respeto que no te dan, la verdad, es injusto”.
También se les preguntó cómo es enfrentarse a la crisis económica con los laburos más precarios que por lo general les toca a la juventud en los barrios como Lugano: “En el día a día es muy complicado, más para la gente de nuestra edad, somos todos jóvenes que para poder acceder a un laburo en blanco o estable es muy difícil” decía Felipe (23), quien se encuentra desocupade momentáneamente, seguía: “Nos la tenemos que rebuscar como sea, a veces ni se puede comer… la precariedad se vive día a día, en los puestos de trabajo donde dejás el cuerpo y la vida también”
Resaltaban la importancia de organizarse, Natalia (24), docente del barrio se sumó a dar su solidaridad y cuenta sobre la necesidad, cada vez más profunda, de las familias que van a buscar los bolsones de comida “miserables” que se entregan cada 15 días en los colegios, continúa diciendo, “Me parece que mientras el gobierno saca el IFE, nos intenta convencer de un pacto social, a los trabajadores no nos queda otra que organizarnos” y agregó “La juventud somos los que tenemos los laburos más precarios y si no nos organizamos nosotras, la crisis va a seguir recayendo sobre nuestras espaldas”
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Salva (25), estudiante y trabajador precarizado considera que son muy importantes los espacios de organización para la juventud porque actualmente hay una situación muy complicada para la clase trabajadora, “Estamos trabajando por salarios aberrantes, la plata no alcanza y realmente no hay ningún sindicato, ninguna organización estatal que vele por los intereses de la población”
Nico (24), trabaja en un laboratorio y se refirió al desalojo y represión en Guernica como “un antes y un después” considera que los Gobiernos Nacional y Provincial no tuvieron ni una propuesta para las familias con niñes que necesitaban un pedazo de tierra para vivir y hacía hincapié en que esas tierras se las iban a dar a los ricos para la construcción de countries y canchas de golf.
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Si hubo algo que quedó claro después de los hechos en Guernica es que “vale la pena luchar y que la salida es organizándose entre precaries y otros sectores de trabajadores, por trabajo, vivienda y salud digna”, así lo manifestaron.
En los próximos días esta juventud que no se resigna se propone hacer una caravana lo más vistosa posible por el barrio, para levantar los reclamos como trabajo con derechos para todxs.
Se resolvió en asamblea: