Educación Pública. Votar al gobierno y callar a los docentes: La política gremial del SUTEBA

La asamblea se inició alrededor de las 18 hs. Desde allí, con la única voz de los integrantes de la conducción del sindicato, los referentes de la celeste de Baradel presentaron su memoria y balance. Allí desarrollaron su defensa del gobierno, plantearon que "los salarios aumentan y estamos cada vez mejor", que "hay un plan de obras de infraestructura y un fortalecimiento de la educación pública".
También expresaron que, frente al avance de la derecha, es necesario construir relación de fuerzas con "épica militante". La propuesta para eso, "esperar a las elecciones y votar a este gobierno nacional y popular".
La insólita defensa del gobierno no es ninguna novedad. Así vienen expresándolo en cada reunión de delegados convocada este año: reuniones informativas, no resolutivas, que la conducción viene convocando para no llamar a asambleas resolutivas y democráticas en las que pueda participar toda la docencia.
Basta con recorrer las escuelas para saber que esas obras de infraestructura no existen, y si las hay, son aisladas e insuficientes. Esos "salarios que suben" de los que habla la celeste son los salarios que se come la inflación todos los meses, esos que estan por debajo de la línea de pobreza y que empujan a los docentes a trabajar dos o tres cargos, en una sobrecarga laboral totalmente insalubre, que atenta contra las condiciones de vida de los trabajadores de la educación y contra la calidad educativa en las aulas. Es la defensa a un gobierno que implementó en los últimos años planes de precarización para la docencia (como los ATR, PIEDAS) dejando a miles de docentes por fuera del estatuto e incluso achicando esos planes y dejando a otros miles en la calle, desempleados.

Luego de la presentación de los distintos secretarios gremiales y de la lectura de las dos propuestas de Memoria, Balance y Orientación, era el turno de las intevenciones de los y las docentes allí presentes. Sin embargo, rápidamente la conducción votó cerrar la lista de oradores y dar por finalizada la asamblea, en un acto totalmente anti democrático que solo tiene como objetivo silenciar las voces críticas. Muchos docentes decidieron no avalar semejante atropello retirándose de la asamblea.
Temas fundamentales e importantes no pudieron ser planteados en la asamblea, tales como el del cupo alimentario (algo fundamental ya que hace a la alimentación de muchos pibes que solo comen en la escuela), el estado de los edificios, el reclamo de Edificio propio para la EARI, el 54 y otras escuelas del distrito, el ataque a la Educación Artística con el cierre paulatino de la FOBA (Formación Básica) llevada adelante en toda la provincia, la necesidad de apertura de cargos, el pase a planta de los docentes precarizados, la 5ta hora, las situaciones de violencia en las escuelas fundamentalmente hacia los y las docentes, el salario devorado día a día por la inflación, el funcionamiento del IOMA, entre tantas otras cuestiones a los que la conducción de Baradel quiere hacer oídos sordos.

Esta acción de la conducción es totalmente consecuente con su política gremial: Si la orientación es esperar hasta las elecciones para votar al oficialismo, es fundamental para su política que todo el tremendo malestar que se desarrolla por las políticas de ajuste de ese gobierno no se exprese en ningún lado. Hoy llaman a esperar y votar en 2023 de la misma forma que en 2018 le plantearon la tregua a Vidal llamando a sacar a Macri en las urnas con el "Hay 2019" (tregua que seguimos sufriendo las y los trabajadores con la llegada del FMI y el endeudamiento que hoy estamos pagando centavo a centavo bajo el gobierno del Frente de Todos).
Hubo dos conceptos que no aparecieron en toda la jornada desde la mesa: Deuda externa y plan de lucha.

La desmovilización y pasivización que propone la conducción solo da lugar al avance del ajuste, al empeoramiento de las condiciones de vida del pueblo trabajador y al fortalecimiento de esa derecha que el SUTEBA dice que quiere enfrentar. Si la relación de fuerzas se construye, la principal apuesta de la burocracia sindical del SUTEBA, al igual que la del resto de las conducciones peronistas, es debilitarla para ubicar a sus dirigentes en las listas de alguna variante política patronal.

El ejemplo de los trabajadores que están enfrentando al ajuste muestra que las fuerzas existen. Esto se viene expresando en los paros docentes convocados por la multicolor, que vienen siendo masivos pese a la militancia en contra de los funcionarios del gobierno y la propia conducción celeste. También se observan las fuerzas en otros sectores de trabajadores como los del neumático, que en las calles y coordinando con otros sectores le ganaron a la inflación, y en los y las trabajadoras de la salud que rompieron el techo salarial de Larreta en CABA y hoy siguen peleando en PBA.
Frente a la política de pasivización propuesta por las burocracias sindicales que solo llaman a esperar a las elecciones, es necesario poner en pie una gran Coordinación nacional de trabajadores y sectores en lucha para organizar toda la fuerza existente y enfrentar el ajuste en curso.