En la provincia los salarios docentes serán depositados sin los incrementos homologados en noviembre 2023. Al mismo tiempo, el gobierno descontará los días en los que el gremio llevó adelante medidas de fuerza, un ataque al derecho a huelga.
Lunes 1ro de julio 12:30
Este fin de semana los trabajadores de la educación de Río Negro encontraron en sus liquidaciones descuentos de hasta $120.000. Los descuentos llegan luego de amenazas del gobernador por las medidas de fuerza realizadas el viernes 14 y miércoles 19 de junio.
Además de este ataque al bolsillo, el Gobierno de Juntos Rio Negro difunde información falsa para dividir a la comunidad educativa culpando a los docentes por quitar días de clases cuando son los trabajadores quienes mantienen abiertas las escuelas a pesar del desfinanciamiento y la crisis.
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El ataque a las posibilidades de organización y reclamo es un eje de los gobiernos tanto provincial como nacional. En la Cámara de Diputados estará ingresando este mes el proyecto de declarar "servicio esencial" a la educación lo que representa una limitación a la posibilidad de realizar paros y lo más importante: sin destinar un sólo peso más al presupuesto.
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El gobernador está envalentonado contra los trabajadores en consonancia con el ataque al derecho a huelga que pretende el oficialismo nacional. Descontar dinero del salario por días de paro -derecho legítimo de los trabajadores- promueve la idea de que la huelga no es un derecho. Weretilneck atacó primero al sector de salud, en marzo, sumariando enfermeras y ahora hace lo mismo con la docencia. Igual de patronal y anti obrero que Milei.
Para desmovilizar el Gobierno se aseguró de que los docentes puedan ver los descuentos antes de los días 2 y 3 de julio que serán las próximas jornadas de paro votadas en el Congreso en Villa Regina la semana pasada.
UnTER reforzó el llamado para las medidas de fuerza con el pedido de paritarias al Gobierno y que se cumpla con el acuerdo homologado del pase remunerativo de 30.000 pesos de la paritaria 2023. También exigió la recomposición salarial en sumas remunerativas y por cargo, además de «la derogación de las resoluciones que avalan descuentos».
A estos reclamos se suma la crisis edilicia de varios establecimientos teniendo que suspender las clases los días de lluvias, la obra social IPROSS que prácticamente no funciona y un salario pierde contra la inflación todos los años.
En diálogo con Agustín Barragán, docente de secundaria en Bariloche, delegado de UnTER y militante del PTS y de la corriente nacional docente 9 de abril, nos expresó:
"Es necesario que la conducción de CTERA que reúne más de un millón y medio de trabajadores de la educación en todo el país deje atrás su política de conciliación con el gobierno y convoque a un verdadero plan de lucha que se ubique a la altura del ataque de Milei y la falsa oposición. Lo mismo las CTAs. Ninguna central convocó a paro el día de votación de la Ley Bases, y por ello son responsables de garantizarle al gobierno pasar leyes de ajuste sin conflicto.
En Río Negro la UnTER dirigida por la lista Azul Arancibia llama a la docencia a paros impuestos desde arriba, sin debate ni asambleas por escuelas. Paros aislados que buscan mostrar a la conducción provincial como combativa pero poco tiene de combativo un plan que no promueve la democracia desde abajo y prácticamente no afecta el funcionamiento normal de este modelo de hambre. Es urgente que unamos las luchas y salgamos a pelear junto a otros sectores."