Tucumán. Ajuste en la UNT: recortan horas de los talleres en la Escuela de Luthería

Esta semana iniciaron las clases en la Universidad Nacional de Tucumán y los estudiantes de la Escuela de Luthería que cursan las carreras de Licenciatura en Luthería y Técnico Profesional en Luthería se dieron con la noticia que de los históricos tres turnos (mañana, tarde y noche) en los que se podía cursar la carrera solo hay disponibles dos: turno mañana y un turno intermedio que abarca parte de la tarde y parte de la noche. En los hechos la reducción horaria significa la supresión de un turno. Este recorte se vio acompañado por la instalación de un sistema de correlatividades y condicionalidad en el cursado de la carrera así como designaciones docentes que no contemplan el histórico funcionamiento de la escuela y atacan fuertemente la oferta académica.

La escuela de Luthería de Tucumán cuenta con más de 70 años de trayectoria lo que la convierte en la escuela de Luthería de instrumentos pulsados y frotados más antigua de América. Durante toda su historia la escuela ha mantenido su carácter público, gratuito e irrestricto, lo que la hace única en el mundo. Año a año jóvenes de todos los rincones del país, de distintos países de América y el mundo llegan a Tucumán para comenzar o continuar sus estudios.

La currícula de las carreras que se dictan en la Escuela está compuestas por materias teóricas y prácticas teniendo centralidad el taller práctico, donde se construyen los instrumentos musicales. Históricamente los estudiantes han podido elegir entre tres bandas horarias para cursar taller: turno mañana (9:30/12:30), turno tarde (15:30/18:30) y turno noche (18:30/21:30). Esto permite que jóvenes que trabajan para costearse sus estudios tengan la posibilidad de poder acceder al cursado del taller, sin importar si trabajan a la noche, a la mañana o a la tarde.

Cristina estudiante de la Licenciatura en Luthería nos contaba cómo se enteraron de esta situación “Una semana antes del comienzo de las clases nos reunimos en una Asamblea Docentes y Estudiantes donde nos notificaron las intenciones de la Decana de la Facultad Silvia Agüero de cerrar uno de los turnos de taller. Esta noticia nos preocupó enormemente a todos y todas porque los nuevos horarios planteados dejan afuera de la escuela sin la posibilidad de estudiar a muchos compañeros y compañeras. Armamos una nota donde expresamos nuestra preocupación por esta situación pidiendo una audiencia con la Decana de la Facultad de Artes, pero nunca recibimos una respuesta.”

El ajuste en la educación pública y especialmente en las Universidades es motivo de preocupación para toda la comunidad académica. Los docentes universitarios a nivel nacional vienen llevando adelante un plan de lucha con paros y movilizaciones por el congelamiento de sus salarios frente a una inflación que ya alcanza el 300% anual. Ahora comenzamos a ver cómo se suman ataques por carrera como lo que está sucediendo en Lutheria.

Gonzalo, estudiante de la Licenciatura, nos decía: “Este ataque a la escuela lo vemos en sintonía con el ajuste que está llevando adelante el gobierno nacional de Javier Milei, congelando y recortando presupuestos universitarios. Con las medidas tomadas por la Gestión de Artes se avanzaría hacia una Escuela más restrictiva y elitista.”

Sobre cómo piensan seguir frente a esta situación Seba nos contaba: “Estamos llamando a todos los compañeros y compañeras de la escuela a una asamblea para que resolvamos qué medidas tomar frente a esta situación, estos ataques no pueden pasar”.

Ésta semana inició el cursado en la Facultad de Artes en todas sus carreras, “menos los estudiantes del turno noche de Lutheria”, dice un cartel en el patio, muestra de visibilidad por parte de la agrupación Contraimagen. Es necesario que desde abajo estudiantes y docentes empecemos a organizarnos, el CEFA tiene que convocar a asamblea ante cada ataque a la educación pública y no dejar pasar y normalizar el ajuste.

Desde muchas universidades nacionales se expresa la preocupación por el presupuesto para el 2024, alertan que con esos números no se llegaría a pagar los sueldos de los docentes en Mayo. Por eso estas asambleas que llevan adelante desde la carrera de Luthería los estudiantes y docentes, organizándose desde abajo; además de ser una muestra del impacto del ajuste, son una prueba alentadora de la organización en defensa de la educación pública, que, dado la situación crítica, promete replicarse en otras carreras y facultades. Ese es el camino, como en Tucumán ya lo mostró la Asamblea Multisectorial de la Cultura peleando contra la Ley Ómnibus y el DNU.