Ayer se realizó la segunda audiencia por “amenazas coactivas y daño agravado”. Un nuevo capítulo de la farsa montada para criminalizar la protesta.
Martes 20 de diciembre de 2016 14:53
Ayer se llevó a cabo la segunda Audiencia en el Tribunal Oral Federal N° 1 por la causa de “Amenazas coactivas y daño agravado" contra Milagro Sala, Graciela López y Ramón Gustavo Salvatierra. La causa data de un escrache al entonces Senador Gerardo Morales en el Consejo de Ciencias Económicas en 2009.
La dirigente de la Tupac Amaru llega imputada como instigadora de los hechos ocurridos hace siete años, organizado por otras organizaciones sociales, sin su participación.
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El primer testigo en declarar fue el dirigente de la UCR, Leandro Despouy -en ese entonces ocupaba el cargo de Presidente de la Auditoría General de la Nación, y actualmente es Embajador extraordinario plenipotenciario y representante especial para los Derechos Humanos-, quien lo hizo a través de una videoconferencia desde la Embajada Argentina en Suiza.
Durante todo su testimonio se dedicó a expresar más deducciones suyas que hechos de los cuales pudiese dar certeza, como fue el hecho de su propio reconocimiento de que no pudo ver heridos pero entiende que los hubo.
Ante tales descripciones generales, desde la Fiscalía intentaron dar lectura frente a él de su propia declaración en Instrucción, a lo que la abogada de la defensa –Elizabeth Gómez Alcorta- se opuso, solicitando se realizase la pregunta sin más, tal como establece el Código Procesal Penal. La respuesta del Presidente del Tribunal fue realmente extraordinaria, instó a la abogada a no entorpecer la intervención del Fiscal que sólo “está ayudando a la memoria” (sic). De esta manera se vivió un momento tenso dado el llamado de atención realizado por Alcorta, quien refirió la vulneración del ejercicio del legítimo derecho a defensa de Milagro Sala.
Pero la “ayuda memoria” no sirvió más que para continuar con elucubraciones sin prueba alguna. Despouy debió reconocer que “no percibí la presencia de Milagro Sala ese día (…), tampoco escuché que la mencionaran”, y tampoco pudo sostener que le constara que detrás de la manifestación ocurrida aquel 16 de octubre de 2009 hubiese estado la Tupac Amaru.
La segunda testigo citada durante la jornada fue la Contadora e integrante del Directorio del Consejo de Ciencias Económicas Blanca Julia Juárez, quien fue parte de la organización de la Conferencia realizada en la dependencia del Consejo de Ciencias Económicas en 2009.
Juárez sostuvo con total convicción que una mujer “dirigía a las personas que agredieron a Gerardo Morales” pero sin embargo no pudo acreditar en qué basaba dicha certeza al ser repreguntada por Gómez Alcorta.
Así su “firme” declaración comenzó a mostrarse más débil, reconociendo luego que “no vi a Milagro Sala ese día” y que tampoco había gente con insignias ni ropa de la Tupac Amaru durante aquella jornada.
Un nuevo momento de tensión entre la defensa de los imputados y la presidencia del TOF se percibió cuando Gómez Alcorta quiso dejar explícitas las contradicciones en las declaraciones realizadas por Juárez durante la audiencia y las voluntariamente hechas en la etapa de Instrucción, donde relató los dichos de la mujer que presuntamente dirigía al resto de manera sumamente escueta, realizando en el debate oral una ampliación contradictoria con sus recuerdos a horas de ocurridos los hechos.
Llamativamente, en la declaración de Instrucción Juárez había relatado que la discusión entre Gerardo Morales y la mujer que presuntamente dirigía esa protesta, esta última le dijo al entonces Senador “no te metas con las organizaciones sociales”, y en esta audiencia agregó amenazas contra la vida del actual Gobernador.
Finalmente, la abogada de la defensa mencionó a la testigo la solicitada publicada el día 9 de diciembre, y que lleva la firma del Consejo de Ciencias Económicas de Jujuy (junto a La Unión Industrial, la Unión de Empresarios, la Cámara del Tabaco, la Sociedad Rural, la Cámara Minera, la Unión de Cañeros Independientes y la Cooperativa de Tabacaleros). Dicha solicitada sostiene que “La Sra. Milagro Sala está siendo juzgada en nuestra provincia por delitos comunes y graves” y que “considerarla presa política mueve al escándalo”, mientras se brinda “pleno apoyo” al gobernador Morales -principal querellante- y la Justicia jujeña ante el cuestionamiento de organismos internacionales.
Juárez admitió que la misma había sido aprobada por el Consejo Directivo de la institución de la que, casualmente, ella resulta ser miembro. Así mismo admitió que ella votó a favor de dicha solicitada. Elocuente respuesta considerando que la “enemistad manifiesta” con los imputados o algún tipo de “interés en el desenvolvimiento del proceso” había sido negada al inicio de su declaración.
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A su turno prestó testimonio el Licenciado en Comunicación, Iván Lello, quien en aquel momento trabajaba para el Instituto de Políticas Públicas perteneciente a la Unión Cívica Radical. Lello declaró no recordar ninguna expresión específica de ese día dado que “ha pasado mucho tiempo” desde que los hechos se han producido. Sin embargo destacó que la gente que ingresó y generó los disturbios “no tenía insignias de la Tupac Amaru”.
Los siguientes testigos aportados por la querella fueron todos miembros de la fuerza policial que no tuvieron mayores datos que aportar salvo elucubraciones sobre que escucharon que la manifestación había sido planeada por Milagro Sala o la Tupac Amaru, sin poder sostener la presencia de la dirigente o su organización en aquellos hechos.
Pero el testimonio del comisario retirado, Jorge Favio Zerpa, aporta un dato relevante y preocupante. Se refirió a que tuvo a su cargo la investigación del hecho y reconoció haber infiltrado personal de civil en una marcha posterior al hecho, a los efectos de cumplir con la orden de dar con el paradero de las personas que tenían orden de detención.
La defensora técnica de Milagro Sala, al finalizar las declaraciones de los testigos, solicitó se agreguen nuevas pruebas relacionadas con dichos de René Orlando Avellano en relación a si trabaja para el Gobierno de la Provincia y la necesidad de que sea nuevamente citado para ratificar sus dichos en relación a este tema, solicitud que contó con el apoyo de la Fiscalía.
El juicio por la conocida como causa de los “huevazos” continúa hoy. Mañana se dictará la sentencia. El Centro de Profesionales por los Derechos Humanos y el PTS-Frente de Izquierda convocan a movilizar al Tribunal para repudiar esta farsa que pretende legitimar la criminalización de la protesta y la detención ilegal de Sala por realizar un acampe.