Para perder los beneficios del blanqueo de capitales, tendrían que haber sido imputados antes de ingresar al programa.
Martes 28 de agosto de 2018 09:36
Los empresarios que Cambiemos premió con el blanqueo por evasores, no verán afectado este beneficio por coimeros. Así lo confirmó la AFIP, ente recaudador que llevó tranquilidad a los hombres arrepentidos.
"Los eventuales autos de procesamiento en la causa de los cuadernos no afectarán los beneficios entre quienes se sumaron al blanqueo porque la ley no es retroactiva", sostuvieron desde la AFIP. En los últimos días se había especulado con la posibilidad de que la AFIP recayera sobre ellos con multas y sanciones millonarias.
Un alivio para los señores ¿no?. Con la ley 27.260 de Sinceramiento Fiscal (blanqueo de plata no declarada por la que evadieron impuestos por millones), ya habían dado un paso en sincerarse. Ahora, ante Bonadio, han ido más allá. Han confesado y se han arrepentido por haber pagado coimas. ¿Hace falta más martirio para estos hombres de negocios que dicen haberla pasado tan mal, siendo apretados por funcionarios que les pedían plata, teniendo que ceder para resguardar las fuentes de trabajo y la integridad de su personal?
Según la ley, para quedar fuera del blanqueo tendrían que haber sido imputados por algún delito común del orden económico antes del 31 de marzo de 2017, fecha en que finalizó el blanqueo y ser procesados.
El perdón fiscal caería si los arrepentidos hubieran ingresado al blanqueo de manera condicional, si el empresario tenía una causa preexistente por evasión o por otros delitos económicos y ahora es procesado, según explicó el sitio Infobae.
No importa que confiesen ahora que buena parte de sus fortunas se amasó con corrupción. Nadie los imputó antes. Por ende, siguen perdonados.
El asunto puede ser más preocupante para aquellos que además de haber sido nombrados en los cuadernos de Centeno, ya están imputados en las causas de Odebrecht. Se trata de las investigaciones por corrupción en la obra pública, en la construcción de las dos plantas potabilizadoras de Aysa. Otra causa investiga las coimas confesadas en Brasil, en el marco de la megacausa conocida como Lava Jato, por el soterramiento del tren Sarmiento.
A cargo de los jueces Sebastián Casanello y Marcelo Martínez de Giorgi, estas causas involucran a varios de los arrepentidos del cuadernogate: el titular de Esuco, Carlos Wagner, a Angelo Calcaterra, ex presidente de Iecsa y primo del presidente y a Luis Betnaza, director del Grupo Techint.