Fue con una declaración en la legislatura porteña. Solo los bloques del Frente de Izquierda y Autodeterminación y Libertad se opusieron
Viernes 18 de mayo de 2018
Ayer, el macrismo presentó en la Legislatura de CABA un proyecto de declaración en el cual expresa "su más enérgico repudio y preocupación ante las pintadas con consignas violentas y antidemocráticas." El bloque kirchnerista, con la excepción de la diputada Lorena Pokoik -que se abstuvo- votó a favor de la denuncia.
En los fundamentos plantean: "En la madrugada del 10 de mayo del corriente año las paredes de la sede del Partido Demócrata de la Capital Federal aparecieron pintadas con dibujos y frases en contra de la figura del Presidente de la Nación, Mauricio Macri, del Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta y en particular hacia la creación de la Universidad Docente de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (UniCABA)"
Los estudiantes vienen manifestándose junto a los docentes y la comunidad educativa contra un proyecto inconsulto que busca destruir la formación docente. Mientras el gobierno habla de jerarquizar la docencia, ataca duramente a los trabajadores de la educación que luchan por mejores condiciones laborales. Las pintadas forman parte de la bronca que surge frente a un gobierno que exige diálogo mientras impone por la fuerza su política.
Con el fin de desprestigiar no solo a los estudiantes que enfrentan el cierre de los terciarios, sino también a cualquiera que salga a luchar contra sus ajustes, es que el Macrismo impulsó esta declaración. Es la continuidad de los dichos de su Ministro de Cultura, que acusó de "fascistas" a los estudiantes por manifestarse en la feria del libro tras meses de ser invisibilizados por los medios aliados al gobierno.
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Si el Kirchnerismo prestó sus votos para aprobar un proyecto que podía ser aprobado sin su ayuda, es porque pretende presentarse ante los votantes de la capital como una oposición moderada. A pesar de plantear estar en desacuerdo con los fundamentos, votó a favor de esta declaración. Su disputa limitada al terreno electoral con el macrismo los lleva a poner un freno en los movimientos que conduce para no parecer "intransigentes". En el movimiento estudiantil se opusieron a las medidas de lucha activas como el corte en el obelisco, mientras sus legisladores repudian las pintadas.
Pese a llamarse a sí mismos "la principal fuerza de la oposición", brilla por su ausencia cualquier propuesta que apunte a desarrollar un plan de lucha serio que pueda derrotar al macrismo. Si los sindicatos docentes solo bajo la presión de estudiantes y docentes llamaron a un paro ¿qué puede esperarse de esas mismas organizaciones kirchneristas cuando el macrismo lanza nuevos ajustes contras los trabajadores, las mujeres y la juventud?
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Tras años garantizando la gobernabilidad del macrismo en la ciudad, votando ventas de terrenos y presupuestos paupérrimos para educación, el kirchnerismo muestra su cara nuevamente repudiando la manifestación en las paredes por parte de los estudiantes que enfrentan en las calles los planes del gobierno cambiemita.