Se cumplen diez días desde que el femicida Roberto Rejas se dio a la fuga desde su lugar de detención. Familiares y organizaciones políticas se movilizaron para exigir su captura, denunciando la complicidad policial y la responsabilidad del Estado.
Jueves 7 de octubre de 2021 23:21
Se cumplen diez días desde que el exguardiacarcel Roberto Rejas, condenado por el femicidio de Milagros Avellaneda y el filicidio de su hijo Benicio, se diera a la fuga desde el baño del cuartel de bomberos con la complicidad de otros policías. Desde entonces familiares y amigos de Milagros vienen movilizándose para exigir su captura y denuncian la responsabilidad del Estado.
Este jueves la marcha partió desde los Tribunales Penales de Tucumán hasta la Casa de Gobierno, con la participación de familiares de otros casos resonantes como el femicidio de Daiana Juarez, Cynthia Moreira y organizaciones sociales, agrupaciones de mujeres y la izquierda.
"Necesitamos captura inmediata y que se de cuenta el señor Jaldo que no vamos a permitir otra Milagros ni otro Benicio más. Vamos a seguir de pie hasta que capturen a Rejas", sostuvo Amalia Ojeda, madre de Milagros quien apuntó a la complicidad de la familia Rejas con ascendencia en la Policía de Tucumán.
Por estos días el ministro de Seguridad, Claudio Maley, intenta mostrarse activo en la búsqueda de Rejas, pero lo cierto es que el femicida llegó al juicio en libertad, tras cumplir dos años prisión preventiva, pese a que la familia de la joven denunciara amenazas y complicidad policial en el caso. Esta semana Claudio Maley también fue señalado por ofrecerle una panadería a la familia de Facundo Ferreyra, el niño de 11 años asesinado por la policía, a cambio de desistir de la denuncia.
A casi cinco años de la desaparición de Milagros y Benicio, sus restos siguen desaparecidos. La pelea de Amalia fue clave para lograr que se llegue a un juicio y una condena. La fuga de Rejas es parte de la responsabilidad estatal y de un Gobierno provincial que encubre a las fuerzas policiales y es enemigo de los más elementales derechos de las mujeres.
