Es tiempo de derrotar el ajuste de Macri, el FMI y los gobernadores peronistas. Queremos que todo el mundo sepa que hay una fuerza que quiere que esta vez sean ellos quienes paguen la crisis. Mates y facturas de por medio, trabajadores y estudiantes nos reunimos para impulsar comités de campaña del Frente de Izquierda que se propongan llegar a todos lados con estas ideas. ¡Sumate!
Viernes 5 de abril de 2019 10:55
Esta vez no me tocaba trabajar. Sin embargo me puse la alarma tempranito. Me desperté “de toque”, no como cuando voy a laburar. Me cambié, saqué a pasear a mi perrita, miré un poco el face y el insta antes de salir. A eso de las ocho y media ya estaba en el bondi yendo a ver a mis compañeros. Juntarme con laburantes para pensar una campaña contra esta manga de saqueadores, hacer política desde abajo, me entusiasmaba. En el camino se me iban ocurriendo cosas. Pero faltaban unas horas para que compartiéramos nuestras ideas. Primero íbamos a repartir volantes, por el barrio de Villa Crespo, con una propuesta de unidad a Zamora (Luisito, como lo conocemos en el barrio). Nos parece súper importante fortalecer una izquierda independiente de los patrones que pelee por un gobierno de los trabajadores en ruptura con el capitalismo.
Un grupo de compañeros arrancó mientras que, con otro grupito esperábamos al último. Pasados unos minutos vimos la rueda de una moto y dijimos: ¡Ahí está! Y apareció. No era muy tarde así que nos tomamos unos mates. Como era de esperarse, colgamos. Los que estábamos a pie tuvimos que buscar un taxi. Eran pocas cuadras, pero teníamos la llave así que no podíamos volver a “colgar”. Tengo que decir que me “bancaron”. No tenía más plata que para cargar la SUBE. El viaje fue cortito. Una vez en avenida San Martín y después de mirar el mapa con las indicaciones, arrancamos a dejar los volantes. Entre edificios, casas, locales y talleres, se nos hizo la hora de volver. Ya nos estaban esperando.
De vuelta en el local empezamos a cebar mate y desenvolver facturitas y cremonas. Eran cerca de las once y media así que había hambre. El motivo de la reunión: impulsar una gran campaña para terminar con la crisis. Los primeros en pensar la idea fueron los compañeros de la agrupación Violeta del sindicato de las telecomunicaciones (FOETRA) que quieren impulsar la unidad entre trabajadores y usuarios. Ya no podemos pagar las tarifas, vemos que la plata no alcanza, tenemos trabajos precarios, tememos que nos echen y vemos aumentar la pobreza. Sabemos que venga quien venga, nos van a regalar al fondo. Tenemos que derrotarlos antes.
Empezamos hablando sobre lo que pasa en el país. Varias compañeras comentaron que muchos trabajadores llaman para dar de baja los servicios, preocupados porque no llegan a fin de mes. También contaron cómo hace Telecom para que algunos trabajadores acepten retiros “voluntarios”, que no son otra cosa que despidos encubiertos. Otra compañera relataba que en los bancos también hay bronca. Detrás de las cajas ven a diario a jubilados y trabajadores que les cuesta cada vez más llegar a fin de mes. Además de las deudas que crecen, la gente ya retira del banco los últimos 40 o 60 pesos que le quedan en la cuenta. ¿Serán para la SUBE, un paquete de fideos o una leche?
También hablamos del Racing campeón y, entre chistes, nos miramos a los ojos. No queremos que se repita la historia del 2001 en la que trabajadores, jubilados y pobres nos hacemos cargo de la crisis. Los comederos no dan abasto, las escuelas se caen a pedazos y la plata no alcanza. En contraste, los empresarios son cada vez más ricos y se llevan cada vez más dólares afuera mientras nos roban el futuro. No nos resignamos al hambre, a dejar de estudiar ni a que haya pérdidas de gas en las escuelas. La pobreza no es un número, es una realidad y queremos darla vuelta.
No queremos aguantar más la crisis como pide Macri. Tampoco negociar nada con el fondo como dice Kicillof. Ninguno de nosotros se subió a la bicicleta financiera. ¡Que la crisis la paguen ellos!
Te invitamos a participar de los comités de campaña que estamos impulsando para derrotar a Macri, el FMI, y los gobernadores peronistas. Sólo un gobierno de trabajadores puede garantizarlo.