Segunda ola. Garrahan: la dirección del hospital obliga la presencialidad de grupos de riesgo

En la segunda ola, y siendo las y los trabajadores del hospital Garrahan que vienen sosteniendo las salas desde el comienzo de la pandemia, agotados, así como el conjunto del equipo de salud a nivel Nacional y frente a esta situación extrema, el Consejo de Administración obliga a los grupos de riesgo, incluso a varios con solo la aplicación de una dosis de la vacuna contra la covid-19, a que vuelvan a sus puestos de trabajo. Decidiendo, de esta manera, no acatar el DNU 241/2021 del Gobierno Nacional, el cual exime a dichos grupos de la presencialidad.

Lo hacen con la excusa que más del 90% del hospital está vacunado, pero sin realizar dosajes de anticuerpos, única forma segura de saber, si quien fue vacunado, desarrolló inmunidad.

No les interesa buscar una salida a la saturación del hospital, solo están pensando en el costo que significan las y los trabajadores que ya tenemos vulnerada la salud por las condiciones de insalubridad.

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Dicen que el hospital es un lugar seguro frente a la covid-19, mientras suspenden el teletrabajo de los que estaban de licencia, entre otras medidas como la reapertura de servicios, que lleva a la circulación de casi 10.000 personas por día en la institución.

Una actitud criminal en días dónde se llega a los 30.000 contagios diarios y cuando ya murieron 500 compañeras y compañeros de salud a nivel Nacional. Muertes que eran evitables si se respetaban las licencias, los protocolos, si se hubieran entregado equipos de protección personal (EPP). Muertes de la que son responsables los Gobiernos Nacional, de la Ciudad y Provinciales.

En el día de hoy nos organizamos desde muy temprano, convocando a la Conferencia de Prensa, redactando las notas para rechazar la decisión del hospital y recorriendo los sectores. Esta pelea no debe ser individual, instancia a la que quieren llevar a las y los trabajadores, dividiendo las y los licenciados de los que están trabajando de manera presencial, también nos dividen entre contratados y de planta permanente, entre tramos y niveles, debemos unificar las luchas.

Es por eso que convocamos a una Asamblea General el jueves 22 de abril a las 13:30 horas, así como seguimos exigiendo a las centrales sindicales ATE, UTE y AGTSYP que llamen a un plan de lucha conjunto en defensa de la salud y la educación, exigir vacunas para todas y todos, la suspensión de las clases, garantizar conectividad y una IFE de $ 40.000 para las familias que lo necesitan.