En el balance finalizado el 31 de mayo de 2024 la empresa informa una mejora de su ganancia operativa en todas sus actividades principales. Acá damos los fundamentos que demuestran que no hay motivos para pagar salarios de pobreza como a los azucareros. Tampoco para seguir con el trabajo temporario. Dar vuelta esta situación requiere de la organización de la clase trabajadora.
Jueves 7 de noviembre 18:25
El balance finalizado muestra la actividad central de la empresa Ledesma, la producción de azúcar y alcohol, cuya zafra comienza en mayo. Con ventas que alcanzaron los $694.388 millones, un 10% mayores comparadas con el ejercicio anterior en términos reales. Y de las ventas totales el 14,3% fueron exportaciones por $99.658 millones.
La ganancia operativa de todas las actividades de la empresa fue de $90.744 millones y tuvo una mejora del 59% (respecto al año pasado). En esta ganancia juegan un papel importante los ingresos derivados de las inversiones financieras, nada menos que $17.000 millones.
Por su parte, la ganancia neta (luego del pago de ganancias) fue de $39.160 millones, mientras que en el ejercicio anterior llegó a $51.027 millones. La merma se debe, fundamentalmente, al impacto de las devaluaciones del año pasado que aumentan el costo del endeudamiento en dólares de las empresas, en este caso un 253%. Lo cual se lo computa como un costo antes del pago de ganancias, algo legalmente permitido, y que a las empresas les permite pagar menos impuestos.
Al directorio integrado fundamentalmente por la familia Blaquier se le repartieron dividendos por $2.000 millones. Otra muestra de la desigualdad entre los patrones y los trabajadores que producen la riqueza con su trabajo y tienen salarios de pobreza.
En relación a las ganancias por actividades (en millones): $43.632 (azúcar y alcohol), $29.023 (papel y librería), $4.632 (frutas y jugos), $13.485 (agro). En el rubro “otros” informan pérdidas por $51.613, de aquí que al final declaren ganancias por $39.160 millones.
Por su parte, el total de sueldos y jornales representó un total de $129.824 millones, un aumento del 7% real respecto al ejercicio anterior. Lo que se resalta es que la ganancia operativa/sueldos y jornales fue de $0,7, mientras que en el ejercicio anterior había sido de $0,43 pesos. O sea, por cada 1000 pesos de salario que paga la empresa gana 700 pesos.
Esto último es una aproximación a la explotación en un sentido marxista. Por un lado, al considerar que el trabajador durante la jornada laboral crea una determina cantidad de valor (contenida en el azúcar, el papel, los cítricos, etc.) y por otro lado, observar cuánto de ese valor queda finalmente en sus manos, esto es en salario, y cuánto de ese valor es apropiado sin pago por parte del empresario bajo el concepto de ganancia.
Fundamentos para: un salario mínimo igual a la canasta familiar y trabajo todo el año
Este balance ratifica que en Ledesma se podría tener un salario mínimo igual a la canasta familiar. En el caso de los azucareros la categoría 1 comienza en $800.000. Un aumento a $1.100.000 para el conjunto de trabajadores como mínimo podría significar un aumento de la masa salarial de $129.874 a $176.000 millones. Una diferencia de $47.000 millones que por la ganancia operativa la empresa podría afrontar sin grandes dificultades.
Respecto al trabajo todo el año este balance también ratifica que se podría lograr tomando dos medidas: 1) reduciendo la jornada laboral a 6hs. 2) diversificando la producción en el campo.
- 1) Según el último balance el empleo permanente alcanza a 3.119 trabajadores. Si se incorpora un cuarto turno (al reducir la jornada a 6 horas), se podrían crear 1.039 puestos de trabajo todo el año. De esta forma, el total de empleo permanente pasaría de 3.119 a 4.158 puestos.
Vale aclarar que cuando nos referimos a una reducción de la jornada laboral a 6hs. y a la creación de un verdadero 4to. turno no nos referimos a lo que la empresa implementó con la complicidad de directivas sindicales en las décadas del 2000 y 2010 como turno relevante, mal llamado cuarto turno por Ledesma SAAI y la Seabord Corporation-Ingenio y Refinería San Martín del Tabacal, ya que esto fue una reforma laboral de hecho que afecto los derechos establecidos por el convenio colectivo azucarero y que al día de hoy perdura y profundizó los permanente cambios de turnos, quitó el sábado inglés, descanso dominical y los francos compensatorios, reduciendo los jornales que cobraba el obrero azucarero de 40 al mes a 25. Llevando a una pérdida del 45% de la masa salarial. Implementación patronal muy resistida por los trabajadores del Ingenio Tabacal.
- 2) Plan de diversificación del uso de la tierra. La empresa dispone de 140.000 hectáreas propias de las cuales tiene solo 40.000 en producción. Junto con la reducción de la jornada, sin baja del salario, en caso de implementarse un plan de diversificación productiva en el uso de la tierra se podría incorporar a 1.210 trabajadores con trabajo todo el año.
La reorganización productiva contempla parte del suelo destinado a la producción actual de citrus (naranja, limón y pomelo) y/o caña de azúcar o tierras actualmente fuera de producción. Incorporando cultivos a contra-estación y/o actividades pecuarias generando una variedad de alimentos y mediante un uso equilibrado de la tierra y el conjunto de los bienes comunes naturales, cuestión de establecer un equilibrio con la naturaleza. Por ejemplo volviendo a producir cultivos de contra estación como el mango y la palta, que Ledesma SAAI dejó de cultivar en la región, o la banana, papaya y maracuyá que también se cultivaron en los valles subtropicales de Jujuy.
El empleo todo el año implicaría un total de fondos por $184.350 millones, un incremento de la masa salarial de 54.526 millones. Considerando que la ganancia operativa fue de 90.774 millones. Y un punto muy importante: estos números son sin considerar que el empleo todo el año y la diversificación productiva en el campo genera nuevos productos a ser vendidos y ampliar los ingresos monetarios que en este cálculo no estamos incluyendo. O sea, con empleo todo el año se ampliarían la producción y las ventas.
Con la reducción de la jornada y la diversificación productiva se podría tener trabajo todo el año para los 5.368 trabajadores declarados por la empresa. También mejoras en la salubridad y menos accidentes. Medidas de este tipo requieren de la unidad de todos los trabajadores, sus familias junto al pueblo trabajador porque solo se podrá conquistar con un plan de lucha como ha sido a lo largo de la historia.
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Gastón Remy
Economista, docente en la Facultad de Cs. Económicas de la UNJu. Diputado provincial del PTS - FITU en Jujuy, Argentina.