Con las y los secundarios al frente, miles de familiares, docentes y estudiantes se movilizaron a la Jefatura de Gobierno porteño en el marco del paro docente del martes 4. La unidad en la calle: un gran punto de apoyo para enfrentar a Larreta y Acuña.
Miércoles 5 de octubre de 2022 20:21
La movilización, que comenzó en la escuela “Mariano Acosta” y culminó en la Jefatura de Gobierno porteño, fue masiva. Estudiantes de nivel medio agitando banderas por escuela, docentes cargando carteles con demandas en común y familias de la mano de sus hijos e hijas fueron quienes protagonizaron la jornada que también contó con el apoyo y la participación de trabajadores de otros sectores, como los del neumático que vienen de un contundente triunfo contra la patronal y el el gobierno nacional, y referentes políticos, como los diputados nacionales del PTS en el Frente de Izquierda Myriam Bregman y Nicolás Del Caño junto a sus compañeros legisladores de la Ciudad de Bueno Aires, Alejandrina Barry (PTS), Patricio del Corro (PTS mandato cumplido), Gabriel Solano (PO) y Amanda Martín (PO).
Las imágenes hablan por sí solas: la fuerza que se sintió en la multitudinaria movilización es más que evidente. La organización en las calles y en unidad contra las políticas de ajuste de ambos gobiernos (tanto nacional como de la Ciudad) son fundamentales para enfrentar el recorte en educación y discapacidad que tanto se siente en las escuelas. Darle continuidad a la organización de esta fuerza imparable que emerge desde abajo, desde cada aula, cada escuela, es clave para pararle la mano al gobierno de Horacio Rodriguez Larreta y la ministra de educación, Soledad Acuña, quienes insisten con la imposición de una educación para pocos, a medida de las empresas, desconociendo derechos históricos conquistados por la docencia porteña (como la capacitación en servicio) y siendo indiferentes a los cientos de reclamos de familias y estudiantes (como la pésima calidad del servicio de comedor y viandas, falta de vacantes, graves problemas de infraestructura, entre otros).
La organización de asambleas por escuela, de plenarios unificados entre los sindicatos docentes como UTE y Ademys en los cuales se pueda confluir y votar con estudiantes y familias un plan de lucha a seguir, puede ser una gran herramienta para frenar la avanzada sobre la educación pública. El martes 4 se dio un gran paso, ¡se puede ir por más!