Vengo de un instituto público donde estamos en lucha contra la desfinanciación. Frente a los 27.617 millones de euros otorgados por nuestro actual gobierno en armamento, 6.408 millones de euros son destinados a educación.
Jueves 20 de abril de 2023
Frente a los 27.617 millones de euros otorgados por nuestro actual gobierno en armamento, 6.408 millones de euros son destinados a educación por parte de los mismos. Es casi 11 veces mayor que todas las ayudas al estudio y casi 20 veces el coste de pagar la matrícula al total de estudiantes en la universidad.
Mientras los próximos Presupuestos Generales se nos venden como los más sociales de la historia por el gobierno, aunque incrementan el gasto militar y en Defensa un 26% entre las partidas de Defensa y las repartidas en otros ministerios y programas de modernización, pero no dotan suficientemente partidas como las de sanidad y educación que llevan décadas de recortes, los beneficios empresariales serían suficientes como para aumentar en seis veces el presupuesto educativo
Así es como este gobierno actual juega con la dignidad de millones de estudiantes y trabajadores de centros públicos, mientras concierta plazas en colegios concertados, que pese a la prohibición de educación por segregación de sexos muchos siguen segregando clasista, elitista y racialmente, además de invertir aún más en guerra. Nos dicen que no hay dinero, pero es mentira. Sólo los beneficios extra del IBEX35 en 2022 serían suficientes como para aumentar en seis veces el presupuesto educativo
No es raro observar que mientras estudiantes de colegio público asisten a clases con gorros, mantas y guantes, los de la concertada asisten a clases con calor de hogar. Incluso, llega a haber numerosos institutos en los que el amianto (que tanto daño en la salud de trabajadores ha causado) sigue en las paredes del centro, o hasta casos de mala construcción de centros como el desplome de un muro del gimnasio que causó la muerte de un niño de 13 años en un instituto de Ourense el pasado septiembre.
Yo vengo de un instituto donde desde nuestra sección de Contracorriente junto a la plantilla del centro, el alumnado y nuestras familias hemos impulsado una lucha contra la desfinanciación del centro. Decíamos que también “los cargos de Consejerías y Ministerio que destrozan nuestras educación asisten a sus puestos de trabajo en camisa -y esa calefacción también la pagamos todos-, igual que los beneficios históricos de las eléctricas que nos la han subido sin cesar”.
Nuestra compañera Iris, de la sección de Contracorriente en el IES Miguel de Molinos de Zaragoza, con el resto del instituto en lucha
Quitan el dinero de los servicios públicos para sus guerras y empresarios, pero no callamos! pic.twitter.com/r42gUr3Ttn
— Contracorriente Zaragoza #OrganizarLaRabia (@Contrac_Zgz) March 21, 2023
Al mismo tiempo que estos separan por clases, exempli gratia es el caso del colegio Peñamayor de Madrid, donde la supuesta tasa voluntaria ronda entre los 100 y 300 euros, tasa que se convierte en obligatoria. El mínimo de tasa voluntaria ronda los 50 euros en medios-bajos centros. Sin embargo, en muchas ocasiones se les hace pagar a las familias por actividades complementarias, o incluso la misma educación, que ya está financiada por el gobierno de la comunidad, creando así una clara segregación por clases sociales y en muchas ocasiones dando lugar a centros educativos casi sin migrantes.
Así que, mientras existen centros públicos donde cada día hay trabajadores que pelean por una mayor igualdad, están dotados de escasos recursos económicos utópicos para su mantenimiento, y el gobierno mantiene colegios públicos clasistas, elitistas y racistas. El Estado español es en Europa donde más porcentaje de educación concertada hay, estando el 60% de los centros en manos de la Iglesia, llevándose casi 6.000 millones cada año mientras la educación pública está desfinanciada.
Apuntes sobre el sistema educativo español desde la crítica anticapitalista
Podríamos señalar al Gobierno del PSOE con Javier Solana Madariaga como ministro de Educación, en 1990, con una feroz ofensiva contra la educación pública. Pero, sin irnos ya al pasado más remoto, a finales de 2022, la alcaldesa de Madrid, Isabel Díaz Ayuso cedió dos terrenos públicos con un valor de 11 millones de euros para la construcción de centros privados. Estos recortes son parte de un plan aplicado durante décadas y en todo el Estado por los sucesivos gobiernos que han liderado el PSOE y el PP hasta la actualidad.
No hace falta más que ver los comedores de los colegios públicos para apreciar la calidad que este sistema nos ofrece. La mayor parte de los comedores escolares actualmente están en manos de tan solo cuatro empresas: Serunion, Compass Group, Aramak y Ausolan, que sin importarles la calidad ofertada se reparten el dinero de estos centros. Las trabajadoras de los comedores y tiempo libre en la educación llevan años denunciando situaciones similares de recortes y precariedad.
Este gobierno que se dice ser “progresista” es el mismo que aún a día de hoy sigue potenciado el capitalismo de los centros públicos clasistas, elitistas y racistas, y que sigue manteniendo el mismo método de enseñanza arcaico que hace 40 años, la memorización.
Queremos una escuela donde se deje de dar una lluvia de millones a la concertada y pase toda a ser pública y controlada por los trabajadores y estudiantes que hacen que funcione. Una escuela que no sea un campo de pruebas de recortes presupuestarios que hasta nos cuesten la vida, al igual que hace la patronal con su desidia y avaricia causando accidentes laborales. Una escuela que nos motive, que nos de ganas de estudiar y de disfrutar del aprendizaje; dónde no se nos juzgue por una nota; donde la salud mental no sea una asignatura pendiente ni un tema tabú; donde la educación sexual no se encuentre en un segundo plano; y lo más importante donde a estudiantes, limpiadores, personal de mantenimiento y de administración, orientadores, y profesores, no les exploten ni sobrecarguen para satisfacer sus necesidades económicas, que no son otras que vivir a costa de la clase trabajadora.
Como decía otra compañera de Contracorriente de 2º de Bachillerato en Madrid, “queremos una educación pública y laica, sin personas en situaciones privilegiadas que puedan dominarnos. Queremos que las aulas sean seguras y lugares de discusión sobre los problemas de nuestro tiempo, donde podamos tener educación sexual, combatir colectivamente el bullying y mucho más, decidir sobre nuestro futuro y tomar las riendas, empezando por cuestionar esta educación al servicio del capital”
En el encuentro en Madrid saludan a les camaradas que pelean en primera línea en Francia y a los encuentros que hacemos el 21 en Barcelona y este sábado 22 de Abril 🗓️ 16h 🕓 en Zaragoza
(Casa del Estudiante - San Juan Bosco, 7)
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— Contracorriente Zaragoza #OrganizarLaRabia (@Contrac_Zgz) April 17, 2023