Nuevas pruebas salen a la luz y desmantelan la narrativa oficial construida por Patricia Bullrich y el fiscal Carlos Stornelli sobre las detenciones ocurridas el pasado 12 de junio, durante la movilización frente al Congreso. Videos que siguen demostrando las acusaciones iniciales contra los manifestantes, que incluían graves delitos como "atentado contra el orden público y constitucional" e "incitación a la violencia colectiva" son falsas.
Jueves 22 de agosto 20:45
La Policía había alegado que los manifestantes "arrojaban piedras y golpeaban con banderas", sin embargo, nuevos videos demuestran una realidad diferente. Las imágenes captadas muestran que los detenidos el 12 de junio, en el marco de la represión a la movilización contra la sanción de la Ley Bases, fueron seleccionados al azar mientras se retiraban pacíficamente del lugar.
#Atención Nuevas pruebas se incorporan a la causa y tiran abajo la farsa construida por Bullrich y Stornelli sobre la movilización del 12 de junio. Se acusó a los manifestantes de graves delitos “contra el orden público y constitucional”, incitación a la violencia colectiva, etc. pic.twitter.com/ATUntGppmm
— Myriam Bregman (@myriambregman) August 22, 2024
Myriam Bregman, diputada nacional del Frente de Izquierda (mandato cumplido), en sus redes sociales, destacó la importancia de este material: "Queda al descubierto el intento de armar una causa por la ridícula obsesión de Bullrich de ‘encontrar terroristas’". Además, denunció la violencia ejercida por las fuerzas de seguridad durante las detenciones. Las grabaciones muestran cómo sacuden, golpean y tiran al piso a los manifestantes y a los detenidos. Y agregó: “Incluso le arrojan gas pimienta a transeúntes que se acercaron a ver su estado. A pesar de ello, aún hay dos detenidos en Ezeiza".
Desde el primer día, los abogados del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH), Carlos Platowsky y Matías Aufieri, solicitaron todos los registros fílmicos disponibles del momento de las detenciones, incluidos los obtenidos por comercios, bancos, edificios y la red de monitoreo urbano de la Ciudad. Durante las indagatorias de junio, presentaron todas las grabaciones posibles, recolectadas por periodistas, canales de televisión y particulares, lo cual resultó crucial para la excarcelación de los detenidos y para que la jueza Servini dictara la falta de mérito.
A pesar de la demora en la incorporación de estos registros por parte de la Policía Federal, los videos muestran de manera contundente que los detenidos eran parte de un grupo de personas que se retiraba pacíficamente del lugar. En las imágenes se observa cómo la Policía sigue al grupo desde atrás, lo rodea y, en medio del caos provocado por el accionar policial, procede a detener a varios de ellos de manera arbitraria, con golpes, tirándolos al piso, y manteniendo encerrados a los que querían retirarse del lugar.
Estos videos no solo desmienten las acusaciones de que los manifestantes golpeaban a la Policía con palos y banderas, sino que también evidencian el montaje de las causas judiciales impulsadas por Bullrich y Stornelli.
Los abogados Aufieri y Platowsky, quienes representan a tres de los detenidos, han solicitado el sobreseimiento definitivo, un pedido que aún está pendiente de resolución, ya que a pesar de haber obtenido la falta de mérito, no están cerradas las causas judiciales, y con esto demostrar la ilegalidad del conjunto de las detenciones, empezando por los dos que aún están detenidos en el penal de Ezeiza.
Según Aufieri, “Curiosamente (o no tanto), todas las pruebas solicitadas y aportadas por los abogados defensores son las que permitieron demostrar la inocencia de los imputados. Al contrario, el fiscal Stornelli solo ha pedido la declaración de más policías para agravar las calificaciones y posibles penas de los cinco que continúan procesados".
Como queda demostrado en los videos, todo lo que dijeron los policías, y los funcionarios del gobierno junto a Stornelli es falso, “son los que armaron esta causa desde el principio con detenciones arbitrarias, y buscan sostenerla a pesar de que todas las medidas de prueba hacen que se caigan las acusaciones”, afirmó Aufieri. Recordemos las acusaciones gravísimas de Stornelli y Bullrich: terrorismo, atentado al orden público, al orden constitucional, sedición, intimidación pública, todas figuras que ya cayeron en la causa, incluso para los cinco que quedan procesados aún.
Otra mentira expuesta hace unos días, respecto la acusación de que los manifestantes tenían munición de guerra porque uno de ellos supuestamente tenía una “granada de gas lacrimógeno”. Pero Fabricaciones Militares informó que ese material se lo había entregado a Bullrich.
Además, otra mala noticia para el gobierno en este expediente fue el rechazo de que el Senado, pedido por la vicepresidenta Victoria Villarruel, fuera querellante en estas causas. La Cámara de Apelaciones, Sala II, dio lugar a la excepción por falta de acción interpuesta por el conjunto de abogados defensores, considerando que el Senado no podía ser querellante solo por pedido de Villarruel. Los defensores además habían argumentado que implicaba una doble persecución penal, ya que presentaba la acusación en los mismos términos que el fiscal Stornelli.
El expediente se desmorona. De los 33 detenidos, la mayoría ya fue liberada, pero Daniela y Roberto siguen encarcelados en Ezeiza. La urgencia de su liberación y la investigación de las detenciones ilegales perpetradas el 12 de junio son ahora más evidentes que nunca.