Diferentes problemas aquejan la región en términos de Salud, mala evaluación en trato al usuario, bajo presupuesto por habitante y falta de equipamientos, aunque se han implementado algunas mejoras no se soluciona la crisis.
Martes 15 de diciembre de 2015
Recientemente se sumaron 16 nuevas ambulancias (4 para servicios de Atención Primaria y 12 para el Servicio de Atención Médica de Urgencia), además 4 carros de salud dental, 2 camionetas para el Servicio de Salud, 2 buses para hospitales de Tocopilla y Taltal, 7 camionetas 4x4 para apoyar establecimientos de la Región. Además de 12 ventiladores mecánicos y 12 desfibriladores, cuya inversión significó $ 1.550.000.000 de pesos (Ministerio de Salud) y $ 500.000.000 de pesos (Aportados por el Gobierno Regional mediante Fondos Nacionales de Desarrollo Regional). Previamente se habrían recibido 2 ecógrafos y 2 equipos de Rayos X osteopulmonares digitales, inversión que superó $640.000.000 de pesos mediante el FNDR.
Medidas recientes que han venido a buscar responder al grave problema de recursos que tiene el Hospital Regional y que fuera mostrado por la baja evaluación en la Encuesta del Trato Usuario, realizada por el MINSAL, en el cual se ubicó en el último lugar de 64 (con nota 5,7), ya que esta falta de recursos se traduce en sobre carga laboral, como lo expresa Michel Marín, presidente de la Asociación de Médicos del Hospital Regional, “Hoy el hospital no tiene plata para contratar gente y eso conlleva a una peor atención y falta de equipamiento” al comentar que falta más de un tercio de dotación, y que además criticó a los parlamentarios por sus promesas de campaña “Ellos cuando estaban en periodo de campaña firmaron una carta de compromiso donde decían que se iban a dedicar a intervenir para entregar mayores recursos. Pero han pasado dos años y seguimos con los mismos problemas”.
Esta falta de dotación (entre estos se cuentan el déficit de 131 especialistas) y equipamiento requiere que el Hospital Regional deba estar realizando compra de servicios privados, los que componen un 14% de la deuda hospitalaria, deuda que asciende a los $6.100.000.000. de pesos (la cual a mitad de año era $4.000.000.000 de pesos), debiendo los pacientes esperar en promedio unas 12 horas por atenciones de urgencia, con equipos viejos (el Hospital Regional cuenta con un solo escáner que realiza más de 50 exámenes) o falta de estos (no se cuenta con un Equipo de Resonancia Nuclear Magnética, el cual debe ser contratado como servicio externo).
Lo anterior se agrava con la determinación de los recursos destinados para la región en Salud. Si repartiéramos el presupuesto por habitante de la región para un mes, cada habitante recibiría $15.807 pesos mensuales ($189.691 al año), uno de los más bajos del país. En términos generales se destinaron $118.109.707.000 pesos, los que no alcanzan para resolver el problema regional.
El panorama que podemos esperar para este 2016 no dista mucho de la actual crisis. Un hospital altamente endeudado, con públicos problemas de atención, insumos y facultativos médicos, que se traducen en espera y molestias de los pacientes del servicio público, quienes corresponden a los sectores populares de la población y que deben soportar largas esperas a regañadientes, en esta ecuación los trabajadores de la salud actúan como bisagras llevando adelante la prestación de un importante servicio para la población en condiciones precarias, sobre carga laboral, falta de equipos e insumos.
El gobierno hace lo que dice. Ante la desaceleración económica adoptó el lenguaje de los empresarios y no ha escatimado esfuerzos para enfrentarse a los Profesores, los trabajadores del Registro Civil, ni para la escueta negociación que cerró con los empleados fiscales. En salud no será distinto ni para sus trabajadores ni para el presupuesto que requiere el equipamiento hospitalario. De una forma u otra procura que la crisis la paguen los trabajadores y los sectores populares, en vez de que fuesen los empresarios los que con impuestos a las mayores riquezas soportaran parte importante del presupuesto para las principales demandas sociales, como la Salud y la Educación Gratuita al 100%.