Adidas anunció la cancelación de un contrato con el rapero admirador de Trump, tras la difusión de un tuit con comentarios contra la comunidad judía. Valenciaga y Vogue ya lo habían hecho la semana pasada. Ya había aparecido en París con una remera que decía “White Lives Matter” (las vidas blancas importan). Twitter e Instagram sancionaron sus cuentas.
Martes 25 de octubre de 2022 11:07
Este martes, a través de un comunicado de prensa, la empresa alemana de indumentaria deportiva Adidas anunció que cancelará un contrato multimillonario con el rapero estadounidense Kanye West, conocido popularmente como “Ye”.
“Adidas no tolera el antisemitismo ni ningún otro tipo de discurso de odio”, dice el comunicado. Y agrega que los comentarios recientes de Ye a través de Twitter son “inaceptables, odiosos y peligrosos”, ya que violan los “valores de diversidad e inclusión, respeto mutuo y equidad” que, supuestamente, tiene la compañía.
La reacción de Adidas se dio luego que de que la empresa Twitter bloqueara hace dos semanas la cuenta personal del rapero, a raíz de un tuit con contenido antisemita. El mensaje (luego eliminado) decía “Goin death con 3 on JEWISH PEOPLE” (una amenaza de muerte al “pueblo judío”) y agregaba: “Ustedes han jugado conmigo y han tratado de bloquear a cualquiera que se oponga a su agenda”.
Con la anulación del contrario, Adidas dice que sus ventas y producción de indumentaria de la marca Yeezy “se detuvieron”, así como los pagos que debían hacerle al artista. Según el comunicado, la empresa “recibirá un golpe de 250 millones de euros” (US$ 246 millones) en sus ventas del cuarto trimestre de 2022. El primer contrato se había sellado en 2013 y en 2016 se amplió, convirtiendo ese convenio en “la asociación más importante jamás creada entre una marca atlética y una persona que no es atleta”.
A principios de octubre, poco antes de tuitear mensajes antisemitas, Ye causó revuelo al aparecer junto a su novia en el desfile de la “Semana de la Moda de París”, ambos vestidos con remeras en cuyo frente estaba estampado el rostro del reaccionario papa Juan Pablo II, con la leyenda en español “Seguiremos tu ejemplo”. En la espalda, como para completar un mensaje temerario, se podía leer “White lives matter”, es decir “Las vidas blancas importan”.
El uso de esa frase, comúnmente utilizada por los supremacistas blancos estadounidenses, es una afrenta directa al masivo movimiento Black lives matter (las vidas negras importan) de defensa de la vida y la libertad de las comunidades afrodescendientes que históricamente sufren todo tipo de discriminación y ataques racistas en Estados Unidos.
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Pese a ser él mismo afrodescendiente, West llegó al colmo de decir hace pocos días que la muerte de George Floyd (caso emblemático para el Black lives matter) no se produjo por la violencia ejercida sobre él por los policías de Minnesota. Para el rapero, Floyd murió “a causa del fentanilo” y la rodilla del oficial (condenado en julio por homicidio) “ni siquiera estaba en su cuello”. Por esas declaraciones, la familia de George Floyd acaba de demandar a West por US$ 250 millones.
El rapero fue uno de los artistas que apoyaron activamente al expresidente de Estados Unidos Donald Trump, especialmente en sus políticas represivas guiadas por el racismo y la xenofobia. Una de las propuestas del republicano más aplaudidas por Ye fue la de construir un enorme muro fronterizo para bloquear el paso de migrantes pobres desde México.
Si Ye pensaba que le iba a resultar gratis todo tipo de comentarios reaccionarios, se equivocó. Hasta las grandes empresas que ganaron fortunas sponsoreando sus shows y demás productos deciden alejarse de él ante la escalada de sus dichos. La mala prensa por los discursos de odio no garpa. Además de Adidas, ya cortaron sus contratos con él Balenciaga y Vogue, la agencia de “talentos” CAA dejó de tenerlo como cliente y hasta la productora MRC informó que un documental sobre West, por ahora, será archivado.