Las condiciones materiales de la vida de millones, a lo que se le suma la crisis del sistema de salud público, serán la puerta de entrada para la proliferación de enfermedades y epidemias.
Viernes 6 de marzo de 2020 16:45
El nuevo brote de dengue que azota diferentes zonas del país, tiene en la ciudad de La Plata y sus alrededores un nuevo foco de concentración. Al 5 de marzo ya son 20 los casos confirmados oficialmente mientras que decenas de personas se encuentran internadas con sospechas de infección. Dos de los casos detectados son autóctonos, una de ellas en el centro de la ciudad y otra en la localidad de Gorina.
Al día de hoy no hay una vacuna para prevenir contraer la enfermedad, y donde sí la hay (México por ejemplo), aún recomiendan sólo aplicársela a aquellas personas que ya hayan tenido un primer contagio, para prevenir, mediante la vacunación, la contracción de lo que se denomina “dengue grave”, que puede llevar a empeorar el caso. Especialistas en epidemiología destacan que la vacuna debería ser polivalente para la protección de los cuatro serotipos existentes y evitar la exacerbación del contagio.
Con el objetivo de frenar la propagación de la enfermedad que transmite el mosquito Aedes Aegypti, desde la Secretaría de Salud comunal se difundieron videos con explicaciones elementales sobre prevención y se implementaron medidas de limpieza para combatir al mosquito vector del virus. En ese sentido, comenzaron a vaciarse las fuentes públicas y a realizarse fumigaciones en algunos barrios, cuando lo ideal sería fumigar toda la ciudad, sin afectar la salud de la población. Así mismo se pidió a los vecinos mantener la limpieza, vaciando los cacharros que contengan agua y estén a la intemperie; así como el uso de repelente.
Pareciera que desde el municipio hacen la vista gorda a las condiciones en las que viven miles de vecinos. Donde el descacharreo se vuelve una burla cuando en los barrios de la periferia, como en la localidad de Gorina donde hay un caso confirmado, hay acumulación de basura en las esquinas, no se desmaleza hace tiempo y Garro no se ha preocupado en limpiar las zanjas y canteras de la zona. El dengue no podemos combatirlo sólo con folletos y "las buenas intenciones" de los vecinos, como piden en cada audio o video al respecto del tema.
Mientras se tiran la pelota sobre las responsabilidades en políticas de prevención entre el municipio de Garro y la gobernación de Kicillof, los casos de dengue siguen en aumento.
Se vuelve a poner en evidencia el desfinanciamiento que viven diariamente los sistemas de salud provinciales y municipales. No se encuentran en condiciones de atender a las demandas cotidianas de la población y ante una epidemia de estas características muestran aún más sus carencias.
Así, el mercado hace de las suyas a costa de la salud nuestra. Ya empieza a haber faltante de repelente y el precio ya está arriba de los $120 y se pide como recomendación usar cada 4 horas. No hay bolsillo que resista.
Desde la Corriente de Izquierda hemos dialogado con trabajadores de diferentes instituciones sanitarias que expresan una profunda preocupación por la situación de los pacientes en las internaciones y la exposición desatendida por parte de las autoridades a la que se encuentran los trabajadores.
No podemos combatir una epidemia vaciando cacharros y ni comprando a la industria farmacéutica los repelentes.
El dengue en los barrios de la periferia puede hacerse una panzada. Son barrios abandonados por la desidia sucesiva de los diferentes gobiernos. La falta de agua potable, basurales y pastizales están a la orden del día, siendo una fuente de enfermedades para miles de vecinos.
Las cuestiones estructurales que lejos de modificarse se agravan con la falta presupuestaria para obras públicas, la falta de acceso a la vivienda que obliga a miles de personas a vivir en asentamientos en precarias condiciones y un sistema sanitario que se sostiene gracias a sus trabajadores va a darle vía libre a cualquier propagación rápida y efectiva del dengue y otro tipo de enfermedades.
Porque a su vez se suma que muchos de esos vecinos no pueden guardar reposo el tiempo necesario y tienen que volver a trabajar obligados por un sistema perverso que enferma y mata y si no cumplís, te despide.
Es necesario destacar que el brote de dengue no es lo único que amenaza la salud de las mayorías; el sarampión, enfermedad en teoría "erradicada" vuelve a escena; el adenovirus ya se cobró la vida de 5 niñes en el hospital Noel Sbarra de La Plata. Y hoy se detectó el tercer caso de Coronavirus en el país.
Por eso desde la Corriente de Izquierda se exige la urgencia del aumento de presupuesto provincial y municipal, insumos y personal para poder atender a la población y evitar epidemias que sean a costa de las ganancias de unos pocos.