Continúan las negociaciones entre Ucrania y Rusia tras las anteriores reuniones fallidas en Turquía. Mientras, se intensifican los ataques rusos al tiempo que la UE continúa su rearme y Zelenski hace llamamientos a la intervención estadounidense.
Miércoles 16 de marzo de 2022 17:00
El ejército ruso ha intensificado los ataques en varias ciudades ucranianas este miércoles. Los ataques se han repetido en Mariupol, donde las autoridades ucranianas denuncian que las tropas rusas han tomado como rehenes a 400 médicos y pacientes de un hospital, así como en Zaporiyia (sureste del país) y los alrededores de Odesa (suroeste). A pesar de ello, los representantes de Rusia y Ucrania continúan negociando una salida al conflicto y comienzan a acercar posturas.
Zelenski, afirmaba en un discurso esta madrugada que las conversaciones "suenan más realistas". Esta calificación llegaba después de que el dirigente aceptara que su país no entre en la OTAN. Y es que la posible incursión de Ucrania en la Alianza Atlántica es uno de los motivos que ha esgrimido el Kremlin a la hora de tratar de justificar la invasión.
El diario británico The Financial Times, adelanta que Ucrania y Rusia están ultimando un plan para poner fin al conflicto y que han hecho "progresos significativos". Dicho plan constaría de 15 puntos entre los que se incluiría un alto el fuego y la retirada de las tropas rusas si Kiev cumple con ciertas condiciones. En estas se destacan la declaración de neutralidad, por la que Ucrania renuncia a entrar a la OTAN, así como poner "límites" en sus fuerzas armadas.
Rusia informó este miércoles de que uno de los temas que están sobre la mesa es la posibilidad de que Ucrania se convierta en un estado desmilitarizado, al estilo de Austria o Suecia, que son dos de los países europeos que tienen ejército propio pero no están adheridos a la OTAN. Según explicó el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, la materialización de este asunto sería "una opción para un compromiso" que aplaque los ataques, que de momento no cesan y se ceban con los civiles, que tratan de huir de las ciudades sitiadas.
Por su parte, Kiev reclama que se establezca un modelo propio para su país: "El modelo de neutralidad de Ucrania solo puede ser ucraniano", señaló miércoles de forma tajante el asesor del presidente de Ucrania y principal negociador del acuerdo, Mykhailo Podoliak.
Mientras prosiguen las negociaciones, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha intervenido este miércoles por videoconferencia ante las dos Cámaras del Congreso de Estados Unidos: “Ahora os necesitamos, os pido que recordéis Pearl Harbour cuando fuisteis atacados. Recordad el 11-S”, ha reclamado a los congresistas. “Pedimos ayuda para poner fin a este terror. ¿Es demasiado pedir que cierren el cielo para salvar la vida de las personas?”, ha dicho.
Las exigencias de Ucrania incluyen, según el asesor presidencial, que se agilicen los procesos para poder “cerrar el espacio aéreo”. “Ucrania no quiere seguir dependiendo de procedimientos burocráticos que permiten o no cerrar el espacio aéreo”, ha escrito.
Un punto espinoso es la demanda de Rusia de que se reconozca la adhesión de Crimea y que se acepte la independencia de las “repúblicas populares” de Donetsk y Lugansk, situadas en la región oriental ucraniana del Donbás, algo a lo que Ucrania se ha negado hasta ahora. Podoliak dijo al Financial Times que “los territorios en disputa son un caso aparte”. “Por ahora estamos hablando de una retirada de los territorios ocupados desde el inicio de la operación militar el 24 de febrero”, ha dicho.
La semana anterior, la UE acordó por primera vez destinar 500 millones de euros del presupuesto europeo para financiar el envío de armamento a un país, una decisión que se tomó tres días después del inicio de la invasión de Rusia a Ucrania. Al mismo tiempo, varios Estados imperialistas han utilizado la excusa de la guerra de Ucrania para incrementar de forma notoria sus presupuestos militares.
La reaccionaria invasión de Putin a Ucrania está teniendo consecuencias devastadoras, en primer lugar, para la población ucraniana, con más de un millón de refugiados, destrucción y muerte. Pero también está afectando gravemente al pueblo ruso.
Las duras sanciones económicas impuestas por la UE y EEUU las están pagando en primer lugar los trabajadores, que enfrentan caídas salariales, despidos o impagos salariales. Con la excusa de la guerra, muchas empresas europeas anunciaron el “cierre” de sus plantas y tiendas en Rusia, dejando de un día para el otro a miles de trabajadores en la calle.
Mientras continúa en algunas ciudades de Ucrania la ofensiva rusa que ya lleva más de tres semanas de una guerra e invasión absolutamente reaccionarias contra ese país. La OTAN, que venía hace años expandiéndose hacia Europa del este (de estos tres países Eslovenia fue la última en ingresar a esta organización político-militar -controlada por los países imperialistas de Europa y Estados Unidos- en 2004) y que aprovechó esta guerra iniciada por Putin para rearmarse, también viene apelando a la diplomacia.
Te puede interesar: ¡No a la guerra! Fuera las tropas rusas de Ucrania. Fuera la OTAN de Europa del este. No al rearme imperialista...
Te puede interesar: ¡No a la guerra! Fuera las tropas rusas de Ucrania. Fuera la OTAN de Europa del este. No al rearme imperialista...