El Senado de Estados Unidos aprobó al abogado Noel Francisco como procurador general, un cargo desde el que defenderá al Gobierno del presidente Donald Trump en los tribunales. Entre 2001 y 2003 trabajó como abogado para la Casa Blanca durante la Presidencia de George W. Bush.
Miércoles 20 de septiembre de 2017 00:00
El Senado de Estados Unidos aprobó este martes al abogado Noel Francisco como procurador general, un cargo para el que fue nominado el pasado marzo por Donald Trump y desde el que defenderá su Gobierno en los tribunales.
Con una votación totalmente dividida y polarizada, con 50 votos a favor y 47 en contra, Francisco no contó con el respaldo de los demócratas, quienes cuestionan su independencia judicial por haberse opuesto en varias ocasiones como letrado a asuntos impulsados por la Administración de Barack Obama.
Su llegada al Departamento de Justicia aliviará la intensa agenda del "Aplaudo al Senado por finalmente confirmar a Noel Francisco como procurador general de Estados Unidos", dijo Sessions en un comunicado tras conocer la aprobación de la Cámara Alta.
El fiscal general, Jeff Sessions, quien tuvo que enfrentarse a diversas batallas en los juzgados federales contra varias de las órdenes ejecutivas de Trump, cuya constitucionalidad es por demás cuestionable, afirmó que "Noel es un abogado brillante y de principios con un excelente historial de trabajo de apelación. Su reputación de análisis hábil y de defensa clara y contundente es indiscutible y ha sido un defensor constante del imperio de la ley y un firme defensor de la Constitución", agregó quien fuera acusado de persiguir a los defensores de los derechos civiles de los afroamericanos y de apoyar al grupo racista Ku Klux Klan durante su etapa como fiscal para el distrito sur de Alabama (1981-1993). Dime quien te defiende…
Francisco es un abogado oriundo de Oswego, en el estado de Nueva York, que ha defendido causas conservadoras y que desde el 23 de enero, poco después de la llegada de Trump al poder, ejercía su nuevo cargo de Procurador General Adjunto Principal.
Entre 2001 y 2003 trabajó como abogado para la Casa Blanca durante la Presidencia de George W. Bush y entre 2003 y 2005 se integró a la Oficina de Consejo Legal del Departamento de Justicia. Recientemente trabajó para el despacho de abogados Jones Day y desde allí defendió tres causas ante el Tribunal Supremo.
Una de ellas representando a entidades religiosas en contra de una cláusula de "Obamacare", la ley sanitaria promulgada por Obama, que obliga a las empresas a contratar un seguro médico con cuidados anticonceptivos para sus trabajadoras.
Al ocupar el cargo de procurador general, un equivalente a abogado del Estado, Francisco tendrá que defender las medidas de Trump que reciban o ya han recibido demandas en los tribunales. Que no son pocas.