En la carrera presidencial uno de los temas más sensibles es el cómo resolver la exclusión de millones de jóvenes de la educación superior. La cuestión es tratada por Xóchitl Gálvez desde una posición claramente neoliberal, pero ¿esto qué significa? ¿qué intereses representa la candidata de la alianza derechista?.
Miércoles 17 de abril
A partir de la entrada del neoliberalismo en México se implementaron dispositivos de mercado introducidos por las políticas de rendición de cuentas, son principalmente: el modelo de asignación de fondos públicos en base al rendimiento de las IES; los planes de planificación estratégica de las universidades; y las técnicas de evaluación y calidad de resultados. Estos procesos provocaron cambios en la gestión de las universidades, y al mismo tiempo, somete a quienes trabajan en ella a mecanismos de desempeño y evaluación privado y empresarial, las cuales tienen por naturaleza la obtención de ganancias y no la de garantizar el derecho de la mayoría a acceder a la educación superior.
Estos mecanismos de cuasimercado representan los procesos de privatización endógena de la educación superior, orientando la financiación de las Instituciones de Educación Superior (IES) en base a su desempeño, induciendo a las universidades a utilizar modelos de gestión empresarial, y por lo tanto a comportarse como una empresa, que al mismo tiempo modifica los modos de trabajar de sus académicos. Siendo la principal consecuencia que la educación superior se oriente únicamente hacia resultados cuantificables y medibles, y las universidades hacia el aumento de la productividad y la búsqueda de la eficiencia.
Según el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados y de la ANUIES, las universidades públicas y en su momento el Conacyt, tuvieron su mayor pico de ingresos entre 2014 y 2016, con el gobierno priista de Peña Nieto. En este sentido, la “Estafa maestra” fue un mecanismo que se utilizó durante el gobierno anterior para desviar alrededor de 7 mil 670 millones de pesos, y de ese dinero no se sabe dónde quedaron 3 mil 433 mil millones de pesos. Al observar el fraude millonario podemos explicar la razón de que haya tantos huecos en el presupuesto público, siendo que aún no sabemos dónde están los recursos que tendrían que ser devueltos para obras públicas o, por ejemplo, para salvar a las instituciones de educación superior en quiebra.
En ese sentido, es necesario enfatizar que la coalición Fuerza y Corazón por México está integrada por quienes idearon y llevaron a cabo la Estafa Maestra en colusión con las castas doradas de distintas universidades del país, y en este proceso electoral han consolidado una alianza con el que, tal vez, es actualmente el cacicazgo universitario más violento del país, encabezado por el político y empresario Héctor Melesio Cuén Ojeda en la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Cabecillas de este cacicazgo, entre los que destaca el hijo de Cuén Ojeda, están siendo investigados por presuntos desvíos de recursos que ascienden a más de 700 millones de pesos provenientes del presupuesto de dicha institución educativa. Y esto habla de la forma en que conciben a la educación pública nivel superior: como algo a partir de lo cual el empresariado pueda enriquecerse con dinero del pueblo al apoderarse de universidades públicas cual si fueran sus feudos.
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El proyecto del PAN-PRI-PRD
En México arrancaron desde hace aproximadamente un mes las campañas electorales por la presidencia de la república y muchos otros cargos más. En la arena política hay, básicamente, dos contendientas (pues Jorge Maynez de MC no tiene posibilidad de ganar el cargo). La que va arriba en las encuestas por una amplia diferencia es Claudia Sheinbaum, candidata del oficialismo. Por parte de la derecha (PAN, PRI y PRD), esta postulada Xóchitl Gálvez. Las candidatas y el candidato hacen toda una seria de promesas, que en la mayoría de los casos, son muy generales y no queda claro cómo se llevaran adelante. Ahora, en lo que refiere la Gálvez ¿cuál es su propuesta para la educación superior?
Gálvez comunicó que su estrategia en materia educativa incluye pagar espacios en universidades privadas para los jóvenes que no alcancen un lugar en los institutos educativos públicos de nivel superior. La candidata presidencial también les ofreció paquetes de datos de internet gratuito, para que estudien y trabajen. Este tipo de propuestas se han hecho en otros procesos electorales. En su momento, Vicente Fox, prometió cosas similares, etc. Es decir, que para las posiciones neoliberales, todo pasa con entregar becas para estudiar en escuelas privadas, pero esto no soluciona el dilema y ahora veremos porqué.
Aquí el problema es que la derecha ve a la educación como una mercancía y no como un derecho. SI no hay lugares en las universidades públicas es porque los diferentes gobiernos en turno (incluido el de la 4T) desde hace décadas abandonó el financiamiento de la educación superior, lo que trajo, entre otras consecuencias, que millones de jóvenes se quedaran sin estudiar.
¿Cómo salir de la disyuntiva? La mejor salida, en nuestra opinión, es aumentar exponencialmente el presupuesto para las universidades. Por supuesto, se puede preguntar de dónde saldrán los recursos, y una posible respuesta es que se deje de financiar la militarización del país y a la Guardia Nacional, política que, dicho sea de paso, Xóchitl Gálvez apoya.
La representante del PAN-PRI-PRD, con su propuesta también pretende engordar aún más los bolsillos de los empresarios dueños de escuelas privadas, pues si el gobierno diera becas para dichos institutos lo que se haría en la vía de los hechos es beneficiar a los empresarios con recursos estatales. Aunado a lo anterior no olvidemos que las universidades privadas son, ante todo, negocios, por tanto, el cobro de colegiaturas podría ser inflado en medida de que el gobierno destinará más recursos para los jóvenes que no tienen escuela.
Como se puede apreciar, la alianza derechista no es una alternativa para el pueblo trabajador y demás sectores plebeyos, porque en el fondo representan los intereses de los ricos y poderosos de este país. La candidata de la derecha lo único que está haciendo es desplegar una campaña de demagogia con discurso empresarial el cual no está convenciendo prácticamente a nadie, ni si quiera a la mayoría del empresariado.
Pero, más allá de las elecciones y quien gane, la conquista de la educación superior al servicio de los hijos e hijas del pueblo trabajador y la lucha contra los planes neoliberales que aun perduran, solo la podemos hacer efectiva con la unidad de docentes, trabajadores y estudiantes, exigiendo un aumento urgente al presupuesto educativo de por lo menos el 10% del PIB, con impuestos progresivos a aquellos que se han beneficiado de convertir a la educación en un negocio, como Carlos Slim y Salinas Pliego y el fin del pago a la deuda externa que perpetúa el FMI, la OCDE y el BM. Luchando por la nacionalización de las universidades, bachilleratos y escuelas, que funcionen bajo el control de sus trabajadores, docentes y estudiantes y centralizando todo el sistema educativo.
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