Qué harías con dos horas libres? Yo cantaría, estudiaría o podría jugar más con mis hijos. Por eso apoyo la campaña de Nicolás del Caño y el FIT.
Viernes 2 de junio de 2017 13:43
5:00AM, suena el despertador. Nueva jornada. Salir de casa, apurando el paso para alcanzar el colectivo. Cruzar la ciudad, 1hora de viaje. Llegar a destino, marcar la entrada. Hoy una ausencia, hay un hijo enfermo que hay que llevar al médico. Que macana, mi compañero perderá el premio.
10 minutos, refrigerio, un café de parado, ni tiempo de leer el diario. Ya cerca del mediodía llega un mensaje. Leer a escondidas, pasar por el super a comprar leche y fideos. Llegaré un poco más tarde a casa parece. Pero el ritmo de producción no merma. Aunque la empresa aduce crisis. Ya avisaron sobre una inminente reestructuración. Es decir: otro aumento en los ritmos de trabajo.
¿Es psicosomático o la muñeca me empieza a doler?
De nuevo. La patronal se queja del porcentaje de ausentismo por carpetas médicas. Pero no habla de los rotos que siguen trabajando, por temor a perder el laburo. Tampoco se habla de aumento salarial o de paritarias.
El gremio traidor ni una asamblea ha convocado. El supervisor pasa preguntando quién puede quedar unas horas ¿Horas extras? ¿Es una broma? ¿Y la crisis?
Siempre hay uno que acepta. Nadie lo espera en casa. Por culpa de las extras perdió su familia, vivir en la empresa y no en tu casa ¿Qué clase de vida es esa?
Mi turno llegó a su fin. 8 horas cumplidas. Marcar salida. Colectivo, 1 hora y media de viaje, ya que el tráfico de la tarde es espeso. Cruzar la ciudad. Casa. Frío. Invierno significa salir de casa de noche y volver de noche.
En casa los niños juegan. O hacen tarea. Un esfuerzo más. Los chicos se divierten, saltan sobre mí. Y la muñeca duele y el dolor es real. Un esfuerzo más.
¿Ocho horas de trabajo? Estamos a disposición de las empresas más que ocho horas.
6 horas de trabajo, 5 días a la semana.
¿Qué haría con dos horas libres? Cantar, pintar, jugar con mis hijos. Y ayudar con sus deberes. Más relajado. Más descansado.
Estudiar. O hacer un curso de origami. El tiempo es mío, mi salud también.
Yo valgo más que las ganancias de los empresarios.