Hoy Marcos Peña volvió a insistir en las críticas al juez por “no haber asegurado las pruebas”. Ayer Bullrich y Garavano dijeron que no “se necesitaba probar nada” para justificar la represión.
Martes 28 de noviembre de 2017 11:05
El gobierno nacional sigue presionando y haciendo declaraciones en función de sostener su inverosímil relato de los hechos que terminaron en el asesinato de Rafael Nahuel.
Ayer habían sido los ministros de Justicia y de Seguridad de la nación quienes se encargaron de justificar el accionar de la Prefectura que terminó con la muerte del joven de 21 años.
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“No tenemos que probar lo que hacen nuestras fuerzas de seguridad”, dijo la ministra Patricia Bullrich en conferencia de prensa. Inmediatamente agregaría que “las armas aún están ahí, o ya las sacaron, porque no se pudo entrar y la patrulla de Prefectura” y criticó al juez Villanueva.
Este martes, el encargado de volver a insistir con esa línea fue el jefe de Gabinete nacional. Marcos Peña indicó que "no haber podido asegurar las pruebas y saber qué pasó nos genera una preocupación".
Las declaraciones del funcionario son un claro ataque a la comunidad mapuche y avalan cualquier nuevo operativo represivo futuro contra la misma.
Como lo habían hecho ayer Garavano y Patricia Bullrich, Peña hoy insistió en definir a la comunidad Lafken Winkul Mapu como “un grupo que reivindica el accionar violento”.
Como se sabe, el pedido de desalojo contra esa comunidad nación de una denuncia de la Dirección de Parques Nacionales. Como se informó en la edición de hoy de La Izquierda Diario, la actual dirección de ese organismo la constituyen ex CEO de empresas y socios de abogados que defienden a genocidas.
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El gobierno sigue insistiendo sostener su inverosímil relato sobre los hechos que terminaron en el asesinato del joven de 21 años.
