Los incendios forestales nuevamente golpean el territorio de chile , en medio de una ola en la zona central. En Valparaíso , Quilpué, Viña del Mar , Villa Alemana y Limache son en esta oportunidad las principales afectadas de años de desforestación producto del negocio del suelo. Las consecuencias nuevamente la pagan los sectores populares
Sábado 3 de febrero 17:02
Múltiples incendios se registraron de manera simultánea la noche del viernes en la región de Valparaíso, a 100 kilómetros al este de la capital chilena, Santiago, y no se descarta que el número de víctimas vaya aumentando con las horas, informaron el sábado las autoridades del país.
Hasta el momento, según fuentes del Gobierno, se han consumido cerca de 43 mil hectáreas de vegetación y se reportan 19 personas fallecidas en Villa Independencia, en el sector Achupallas, comuna de Viña del Mar; 15 de las víctimas han sido identificadas, entre ellas, una adolescente de 17 años.
Las devastadoras consecuencias de los incendios nuevamente azotan la región de Valparaíso. Miles de familias despertaron con sus viviendas arrasadas por las llamas y con la angustia de tener algún familiar o conocido entre los cientos de desaparecidos, lo cual solo permite entregar un reporte preliminar de muertos.
Este sábado aún persisten focos activos de incendios, siendo la mayor preocupación por la rápido avance e intensidad del siniestro en Complejo Las Tablas, Viña del Mar, que ha consumido 6.800 hectáreas. A pesar de esto, la titular del ministerio del Interior puntualizó que están confirmándose las cifras, ya que podrían aumentar a 9.000 hectáreas afectadas. El segundo foco se encuentra en Lo Moscoso, Quilpué, abarcando 1.150 hectáreas.
Entre los sectores urbanos más afectados se encuentran localidades ubicadas en cerros densamente poblados que rodean la ciudad costera de Viña del Mar. "Fue un desastre, gente llorando, gente arrancando (huyendo). La ola de fuego partió desde el cerro y empezó a tomar casa por casa y llegó un momento que era incontralable", dijo a la agencia EFE Héctor Liguri, vecino de 47 años de Achupallas, sector donde se han confirmado las 19 muertes.
En El Olivar, otro sector villamarino muy afectado por la llamas, "se vivieron momentos de angustia y desesperación", aseguró Karina Aljaro, de 39 años: "El esfuerzo de una vida se ha destruido en un segundo. Es terrible", declaró una vecina de la zona a la misma agencia.
El presidente chileno, Gabriel Boric decretó el toque de queda en la región durante la mañana del sábado y el estado de excepción, nombrando a un militar encargado de la defensa civil y de la coordinación de la catástrofe.
Aunque es necesaria la mano de obra para remover escombros, no están claras las medidas concretas, más teniendo en cuenta que el presidente Boric acostumbra realizar anuncios grandilocuentes sin ofrecer soluciones concretas.
Al mismo tiempo el gobierno parece querer normalizar la intervención militar en el espacio político para eludir hablar de los problemas de fondo, como la evaluación del plan presentado para evitar este tipo de situaciones, el cual claramente ha fracasado.
Los problemas estructurales que hacen a las condiciones ambientales de la región de Valparaíso más propensas a tragedias como estas han sido diagnosticados desde hace años. La desforestación provocada por el negocio inmobiliario y el saqueo de los recursos hídricos son conocidos. El gobierno se ha negado durante todo este tiempo a implementar medidas que prioricen los intereses de la gente sobre los grandes negocios que depredan el medio ambiente.
