Publicamos una nota de Marcelo García, publicada originalmente en El Extremo Sur.
Viernes 4 de noviembre de 2016
El pasado 20 de octubre se firmó el primer acuerdo de flexibilización laboral en la industria petrolera. La firma la estamparon los empresarios con el aval del Ministerio de Trabajo de Nación y el imprescindible respaldo del sindicalista neuquino Guillermo Pereyra.
La flexibilización laboral petrolera, que estaba en debate y era una posibilidad latente, comenzó a concretarse en la cuenca Neuquina. Las empresas lograron avanzar en su plan de reducción de costos laborales para aumentar la productividad en los yacimientos, especialmente en Vaca Muerta.
El proceso iniciado por el ministro de Trabajo Jorge Triaca a partir de la Resolución 365, donde se proponía “hacer sustentable la industria hidrocarburífera de nuestro país”, puso en marcha la Mesa de Diálogo Petrolero Nacional.
El pasado 20 octubre se concretó el primer gran paso flexibilizador de los trabajadores petroleros y el veterano sindicalista Pereyra –recientemente reelecto- fue el primero en facilitarles el trabajo al empresariado y a la CEOcracia macrista. A cambio, consiguió un bono de 5.000 pesos que se pagará a los petroleros neuquinos antes de que finalice el año.
Hasta el momento no hay novedades sobre si el resto de los sindicatos petroleros firmarán un acta de las mismas características, aunque algunas versiones mencionan que desde Chubut el sindicalista Jorge Avila no estamparía su firma hasta el año que viene. No obstante, no se sabe qué harán José Llugdar y Manuel Arévalo por los Jerárquicos de la Patagonia Austral y la cuenca Neuquina, y Claudio Vidal por los petroleros de Santa Cruz.
