El pasado 27 de Agosto, la asamblea del PTS en el FITU que se desarrolló en Bahía Blanca reunió a decenas de trabajadoras y trabajadores que intercambiaron experiencias y debatieron como organizarse para enfrentar el ajuste y construir una salida socialista a esta crisis. Reproducimos a continuación la opinión de una trabajadora de maestranza que describe las condiciones de trabajo en el sector y denuncia la precarización que prima en las empresas de la rama.
Sábado 10 de septiembre de 2022
Trabajar de limpieza es un oficio como cualquier otro. Se aprenden procedimientos, técnicas, se
limpia en altura, se manipula maquinaria y químicos. Este trabajo mejora las condiciones higiénicas
de los espacios y como vimos en pandemia su rol es esencial. Sin embargo, al igual que en otros
rubros, las condiciones laborales empeoran día a día en tiempos de ajuste.
Cada vez son más los sectores públicos y privados que elijen tercerizar al personal de Maestranza.
En Bahía Blanca la municipalidad, la universidad, el conicet, colegios privados, gimnasios,
consorcios, sociedades anónimas, casas particulares, salones de fiesta y un sin fin de entidades más prefieren no tener en su planta permanente a estos trabajadores y trabajadoras esenciales.
Es que de este modo tienen siempre una persona en el puesto, así sea una persona nueva todos los días. No tienen que hacerse responsable de las cargas sociales, las licencias por enfermedad/ estudio/cuidado de familiares, de paros gremiales (como los de ATE en las escuelas públicas, por ejemplo), de días de duelo, etc.
De todo esto estamos privados quienes trabajamos para algunas de estas empresas, muchas de las cuales tienen anuncios de empleo permanentes en el diario local, evidenciando la cantidad de
personas descartables que toman hasta que las cansan. Hay quienes ya se avivaron y cambian un
poco los anuncios o utilizan otras plataformas, porque han sido escrachados por explotación.
Incluso en las entrevistas laborales o bien mienten con las condiciones, prometiendo mejoras de salario y condiciones dignas ni bien pasado el periodo de prueba o utilizan frases capciosas que despistan a cualquier trabajador ansioso de tener un mango.
Entre las experiencias que puedo contar se encuentran maltratos de superiores dentro de las
empresas de servicio, presionando y llevando “corriendo” a sus trabajadores para que cumplan con
la imposible tarea de limpiar un sector tras otro (sectores a kilómetros de distancia entre sí) para
hacer “magia” en el menor tiempo posible. De esta forma ganan las licitaciones, ofreciendo “el
mejor servicio al menor costo”, a costo del cuerpo del laburante, claro está.
Algunas empresas no dan descanso y algunas consideran como descanso el momento en el que te desplazas de un sector a otro (en la movilidad que puedas). Parece que el derecho legítimo al descanso depende de los caprichos del empleador.
De la misma forma que una persona no puede estar paleando sin parar, no se puede estar trapeando sin parar, hay movimientos que causan lesiones en el cuerpo de por vida, sumado a malas condiciones edilicias de los sectores, donde no cuentan con bachas, con agua caliente (el agua fria/helada causa artrosis), algunos no tienen baño para personal auxiliar, entre otras condiciones deplorables. Hay quienes escatiman en productos y guantes, otros te hacen limpiar tarros de basura cuyo tamaño supera el metro cincuenta donde casi tenés que meterte dentro para limpiarlos. ¿No se considera esto insalubre?
Como si fuera poco, en muchísimos casos, el personal de las entidades contratantes o los privados
no reconocen al personal de limpieza como sujeto de derecho. Por momentos se siente que se está en situación de servidumbre ante un amo quien no contempla el mínimo trato como un saludo. En ocasiones ningunean, ensucian a propósito, escupen o tiran cosas donde ya se limpió, hacen limpiar varias veces el mismo sector, vigilan que no pares dos segundos para acomodarte y seguir, te piden que les prepares café o mate, que limpies sus pertenencias personales y muchas otras vulneraciones que terminan causando desmoralización.
Los salarios que se perciben en blanco están por debajo de la línea de pobreza a Julio de 2022.
Si bien el aumento logrado en paritarias 2022/2023 por el gremio SOMRA es del 60%, este será
pagado en cinco tramos, 20% en Julio, 10% en Septiembre, 10% en Noviembre, 10% en Enero del 2023 y 10% en Marzo de 2023.
En Agosto el personal de Maestranza estaría llegando a los $77,000 mensuales, sueldo que debería
haber estado recibiendo en Enero.
El pago en cuotas de los aumentos salariales más la constante escalada inflacionaria hacen que el
aumento pase desapercibido y se encuentre inevitablemente por debajo de las líneas de pobreza de nuevo en Marzo de 2023.
Para quienes trabajan dentro de una “cooperativa” de servicios de limpieza,
donde la cooperación es solo un nombre bonito que encubre trabajo con aún menos derechos, se encontrarán con peores condiciones ya que están sujetos a las reglas de la entidad, los aumentos no son afines al sindicato que les corresponde, no reciben bonos, antigüedad, no reciben lo correspondiente por hijos y están como monotributistas, por lo tanto de ser echados (pasados a disposición) no recibirán indemnización alguna. A Julio de 2022 están cobrando $50,000 por 7 horas.
Hay empresas que optan por pagar media jornada en blanco y el resto en negro, siendo la hora en negro del valor que quieran, ya que al no firmar papeles el compromiso es de palabra y después de trabajar recién se puede ver si cumplieron o no.
Algunas de estas empresas te dan papel con grilla de los sectores a donde tenés que ir a limpiar,
papel que no tiene identificación alguna, no te hacen firmar horario de entrada y salida, no hay
fichero ni planilla, ni nadie que pueda constatar que trabajaste o estuviste en los sectores que te
mandaron. Esto no puede más que jugar en contra del trabajador, la empresa puede decir que no
fue a trabajar y no se tiene manera de probarlo, le retendrán las horas en negro y de ser necesario
arreglarán con administradores de edificios para que hagan una nota en su contra.
Debemos organizarnos en nuestros lugares de trabajo y junto a trabajadores y trabajadoras de otros gremios que pelean contra la precarización, visibilizar y exponer lo que ocurre.
Ser solidarios como trabajadores de otros sectores y cargos: Exigir que personal de maestranza sea tomado como planta permamente, por mejores condiciones de trabajo, sectores y horarios fijos en todas las Empresas, Entidades e Instituciones. Es con la unidad desde abajo y junto al conjunto de nuestra clase como podremos conquistar nuestros derechos.