Fue este domingo, en una entrevista con Radio 10. La ministra de Seguridad de la Nación dijo, sin embargo, condenar la represión. La duplicidad de un discurso que intenta explicar lo inexplicable.
Lunes 8 de marzo de 2021 08:37
![](local/cache-vignettes/L720xH406/arton190028-6816d.jpg?1739715409)
A Gildo Insfrán no le faltan defensores dentro del Frente de Todos. Este domingo le tocó el turno a la ministra de Seguridad de la nación, Sabina Frederic. La funcionaria afirmó que “"Hay un ensañamiento con el gobierno de Insfrán que es inadmisible, una provocación sistemática, lo que no quiere decir que no haya malestares en algunos sectores de la sociedad de Formosa".
La “provocación sistemática” tiene sus razones. El funcionamiento político semi-feudal del régimen formoseño -gobernado hace 25 años por el mismo hombre- da mucha tela para cortar. Esto es lo que prefiere silenciar la funcionaria del gabinete nacional.
En defensa del gobernador peronista, Fredecic afirmó que “Formosa ha tenido un resultado en su política sanitaria que ha salvado vidas”. Al mismo tiempo, repitiendo la operación realizada por la Secretaría de Derechos Humanos de la nación, condenó la represión del viernes pasado.
Sin embargo, si hay algo que se ha cuestionado con dureza desde muchos ámbitos y también desde la propia población provincial ha sido esa “política sanitaria”. Política que incluyó impedir entrar a miles de personas a la provincia por varios meses; conformar centros de cuidado sin las mínimas condiciones sanitarias o de infraestructura; un manejo completamente arbitrario del mecanismo de hisopados y control de la población.
Esos hechos, acontecidos solo en el último año. A eso hay que sumar las represiones constantes que en las últimas décadas sufrió la población de las comunidades qom. O el avance sideral del negocio sojero que está asociado a esa represión. El “ensañamiento” tiene bastante sustancia a partir de la cual construirse.
Esto no quita que haya una utilización completamente electoralista por parte de la oposición de Juntos por el Cambio. El viaje de Patricia Bullrich a la provincia no puede ser leído de otra forma que como un show destinado a capitalizar espacio electoral.
La duplicidad del discurso gubernamental se explica a partir de las necesidades electorales y políticas. Obligados a condenar una durísima represión para no enemistarse con parte del espacio progresista, al mismo tiempo deben defender a una coalición electoral conformada por sectores abiertamente derechistas. En ese espacio entran gobernadores como Insfrán o Manzur. Entran también ministros como Sergio Berni.
Te puede interesar: La furia represiva de Insfrán, el escándalo nacional y la demagogia de la derecha macrista
Te puede interesar: La furia represiva de Insfrán, el escándalo nacional y la demagogia de la derecha macrista