Desde el gobierno provincial querían mostrar normalidad pero en el distrito no le dan los números, son menos de 20 escuelas las que abrieron sus puertas. Los problemas de infraestructura y las falta de elementos sanitarios demuestran la razón del paro impulsado por la oposición multicolor y es un llamado a conformar Comisiones de Seguridad e Higiene para organizar y coordinar el descontento.
Martes 2 de marzo de 2021
¿Vuelta a las aulas? La docencia de pie en todo el país - YouTube
La vuelta a las clases presenciales de este 1 de marzo tenían el objetivo de dar un mensaje de normalidad. El gobierno nacional y provincial junto al Ministro de educación Nicolás Trotta se han transformado en los abanderados de la vuelta a las aulas sin importar las condiciones.
Lejos de todo discurso la realidad es un hecho. El gobierno no se ha cansado de hacer mil maniobras: desinformación, información oficial que es papel mojado como el plan jurisdiccional que ellos mismos ahora quieren flexibilizar, el cambio en el semáforo epidemiológico. Todo para arrancar el año electoral y complacer a los empresarios que piden que se abran las escuelas, que para ellos, son las guarderías de los hijos de sus trabajadores. Pero en Tigre de 110 servicios educativos, más de 70 escuelas permanecieron cerradas: 66 por no estar en condiciones edilicias, 5 por falta insumos de salubridad e higiene, por falta de personal; sumado a las 11 escuelas de isla que aún no cuentan con protocolo.
Para dar sólo algunos ejemplos, en el jardín 915 que ya tiene casi 40 años, y es una institución que desde hace años no tiene una obra de arreglo, donde por más reclamos hechos, años antes de la cuarentena, aun tiene baños que se inundan. En la EP 18, las clases no comenzaron ya que parte del techo de una galería se cayó, expresando la desidia y la desinversión de años. Las escuelas de la isla no comienzan por no tener un protocolo específico que atienda la realidad de las familias que viven en el delta. Estos ejemplos no son la excepción. Otras escuelas no comenzaron por falta de insumos, algo tan simple como alcohol en gel, sanitizantes, máscaras faciales para las docentes.
Estos datos demuestran que la preocupación de la docencia y las familias no son una simple inquietud. Pasado el año de pandemia, y con perspectiva que continúe, quien se acerque a una escuela puede comprobar que no se ha invertido un peso en educación, y ni que hablar de salud. Recién se está comenzando a vacunar a los docentes que son parte del grupo de riesgo, mientras a los amigos del poder se les garantizaron las vacunas en el vacunatorio VIP. Volver para la foto, como quiere el gobierno provincial, es un verdadero desprecio por la vida no solo de la docencia, sino también, por la de las familias y estudiantes; a quienes tampoco se les garantizan recursos para la conectividad.
Impulsar Comisiones de Seguridad e Higiene junto a auxiliares y familias
El vacunatorio vip no solo mostró que los de arriba se quieren salvar primero, sino que también dejó al descubierto que nadie controla ni garantiza que seamos nosotras junto a las auxiliares, familias y estudiantes, las que seamos vacunadas primero, más allá de los discursos.
Para que no decidan por nosotras, ni nos engañen, es necesario ser partícipes activas de las escuelas donde estamos. Las Comisiones de Seguridad e Higiene escolares, con docentes, auxiliares y familias son organizaciones tan importantes, para que llevemos un control y relevamiento de las condiciones edilicias y sanitarias de las escuelas, pero también para organizarnos por otras demandas que atraviesan familias y estudiantes, como es la conectividad pero también la falta de trabajo que no puede permitir ningún acceso a la educación.
En el distrito de Tigre ya se vienen impulsando estas comisiones, aún de forma incipiente, pero comienzan a mostrar que es el único camino que tenemos para no quedar atomizados: docentes y auxiliares por un lado, familias y estudiantes por otro. La coordinación es muy necesaria para lograr imponer nuestras demandas. De eso hemos aprendido con el asesinato de Sandra y Ruben.
Publicado por Seg e higiene de escuelas de Tigre en Domingo, 28 de febrero de 2021
Hoy quedó demostrado que esa vuelta a clases presenciales, la foto que busco Kicillof, es una mentira más, porque no solo no están garantizadas las condiciones, sino que no hay un plan de vacunación serio para docentes, estudiantes y sus familias.
En las escuelas en sí, nada cambió desde el año pasado. Las condiciones no son las mismas sino que empeoraron, y en las escuelas sin condiciones tampoco garantizan dispositivos y conectividad para los docentes y sus estudiantes, nuevamente el esfuerzo para que las educación pública siga en pie depende de docente y familias trabajadoras.
El paro impulsado por la oposición Multicolor de SUTEBA ha sido un pronunciamiento contra esta situación. Mientras que Roberto Baradel cierra paritarias entre gallos y medianoche y resulta el abanderado de la presencialidad a como dé lugar, crece el descontento en la docencia. Es más necesario que nunca que la bronca no caiga en saco roto y se transforme en organización para unificar la fuerza a nivel provincial e imponerle a la conducción de Torre y Baradel que dejen de ser voceros del gobierno y llamen a asambleas para decidir un plan de lucha por todas nuestras demandas. Esa es la tarea que se comienzan a trazar docentes, auxiliares y familias en las comisiones de Seguridad e Higiene en el distrito de Tigre y que debería ser tomada de ejemplo en todas las seccionales, porque esto recién comienza.