Reforma Constitucional. Vilca: "No seremos parte de un engaño al pueblo trabajador de Jujuy"

A la Comisión de Asuntos Institucionales de la Legislatura de Jujuy.

S/D:

Ante la convocatoria realizada por la Comisión de Asuntos Institucionales de la Legislatura de Jujuy a nuestro partido a los fines de “tratar el Proyecto de Ley de Declaración de la Necesidad de la Reforma Constitucional”, los y legisladores y referentes del PTS en el Frente de Izquierda, Alejandro Vilca (diputado nacional), Gastón Remy (concejal San Salvador), Julio Mamaní (concejal Palpalá), Natalia Morales (diputada provincial mc), Miguel López (consejal Lib. Gral. San Martin mc). Dejamos planteado:

Que hemos sido invitados a ser parte de esta reunión. Sin embargo, nosotros no seremos parte de un engaño al pueblo dado que en esta convocatoria hacen como si se hiciera para escuchar a todas las voces, cuando en realidad los temas a tratar en la reforma están pactados de antemano por el oficialismo y sus socios en la Legislatura. Dos personas, Morales con el apoyo de Rivarola, van a acordar que se puede discutir y que no en la Convención. Vale leer el Art. 6° del proyecto de reforma presentado por el Gobernador, allí deja en claro que: “Será nulas de nulidad absoluta todas las modificaciones, derogaciones y agregados que realice la Convención Constituyente apartándose de la competencia establecida en la presente Ley de necesidad de la reforma parcial de la Constitución de la Provincia.

O sea, como decimos, solo se podrá discutir lo que pactaron otros a espaldas del pueblo. Más aún cuando el propio pueblo trabajador tiene sobradas sospechas que esta reforma será utilizada para finalmente meter una re reelección del actual gobernador. Nosotros no vamos a avalar tal cosa.

Además advertimos del intento de llamar a un supuesto diálogo para consensuar una Constitución entre trabajadores que sufrimos los bajos salarios o el desempleo y los empresarios como los rurales que tienen una enorme proporción de trabajadores no registrados o quienes aplican tarifazos en la luz o el transporte. Esto impulsado por el gobierno provincial y el peronismo que encabeza un gobierno nacional que impone un ajuste brutal sobre salud, educación, obra pública para las provincias, sostienen salarios por debajo de la pobreza como las enfermeras con contratos que cobran 48 mil pesos o municipales que cobran el salario mínimo. Los bajos salarios llevan a que Jujuy sea la primera provincia del país donde 1 de cada 3 trabajadores busquen otro empleo porque no llegan a fin de mes.

Sobre la Constituyente misma planteamos, que la convención está llamada en función de los intereses de Morales, no los del pueblo. El gobernador busca mejorar su situación en la Interna de Juntos por el Cambio y no es para nada descartable que haya maniobras para buscar su re reelección. Mientras, los problemas del pueblo no serán parte del debate.

Por su parte el contenido de la reforma propuesta por el Gobernador podríamos decir tiene tres aspectos completamente contrarios a las necesidades del pueblo trabajador. 1) Los artículos que se van a votar para darle rango constitucional a los mecanismos estatales utilizados en la represión y criminalización de la protesta social del sector que sea, trabajadores, mujeres, pueblos originarios, jóvenes, los que más sufren la crisis en curso y ganan las calles como los autoconvocados de la salud por salarios, las mujeres de los barrios por alimentos y Ni Una Menos, contra los tarifazos o los pueblos originarios en defensa del territorio. 2) Artículos que expresan un alevoso doble discurso para ocultar la realidad. Son aquellas cómo las que plantean la necesidad de “proteger el medioambiente” o “reafirmar el derecho de la provincia sobre sus recursos naturales”, que se votarán mientras dejan correr los incendios en las Yungas dada la falta de presupuesto provincial y nacional para hacerles frente o dan todo tipo de facilidades en el saqueo del litio por multinacionales que le roban al Estado subfacturando las exportaciones y tiene un grave impacto ambiental; o bien los artículos “derechos del niño, niña y adolescentes”, cuando en la provincia el 90% de los jóvenes entre 18 y 24 años trabaja en negro y en el campo continúa el trabajo infantil. Hablan también sobre “derechos de los pueblos originarios”, mientras no entregan sus títulos de propiedad y detienen a sus caciques que enfrentan a terratenientes. 3) Todo lo que no se habla ni se tratará en la Convención. Allí no se podrá discutir nada sobre el salario, el trabajo no registrado, el desempleo, los tarifazo, la situación de la salud o la educación. Lo que le importa al pueblo trabajador no sólo ni está en el temario sino que además se explicita que será considerado nulo si se debate sobre ello.

Es decir que se discutirán los problemas de Morales y su carrera política, no las necesidades del pueblo.

Por todos estos motivos es que rechazamos esta convocatoria y el planteo de reforma de la Constitución del gobierno, y ratificamos nuestro compromiso por defender los derechos de la clase trabajadora ante los gobiernos y grandes empresarios que dejan pasar un ajuste cada vez mayor a pedido del FMI. Ante esta situación seguimos exigiendo a las centrales sindicales y gremios a que rompan su subordinación con los gobiernos y convoquen al paro y a un plan de lucha en todo el país.

Frente a esta Convención a la medida de Morales planteamos que lo que sí debería existir es una Asamblea Constituyente donde pueda debatirse y resolver sobre todos los problemas del pueblo sin ninguna limitación. Allí plantearíamos la necesidad de que ningún salario pueda estar por debajo del costo de la canasta familiar, que debería reducirse la jornada laboral para generar trabajo genuino, disponer la estatización de Ejesa para que el pueblo no sufra ningún tarifazo. Junto a esto, tomar medidas para terminar con este régimen político lleno de privilegios: que ningún funcionario gane más que un trabajador docente, que los jueces sean electos por el voto popular y que sean revocables, igual que los funcionarios.

Por estas medidas se debe pelear porque Morales y Rivarola no están dispuestos ni a que se discutan.

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