Bolsonaro se reunirá con el presidente golpista esta semana. Buscan facilitar en el Congreso la aprobación de la reforma para este año.
Martes 30 de octubre de 2018 14:00
Bolsonaro fue elegido hace dos días y ya comenzó a moverse para aprobar la reforma previsional, que tanto él como su economista Paulo Guedes y su vicepresidente, el general Mourão, habían anunciado como prioridad en su gobierno. Antes de asumir, el presidente golpista Michel Temer (MDB) afirmó, pocas horas después del resultado oficial de la elección, que estaría dispuesto a aprobar la reforma este año si Bolsonaro y el PSL señalaran que están dispuestos.
En el día de la elección, varios sectores de la derecha golpista del parlamento habían declarado apoyo y mostrado que Bolsonaro estaría dispuestos para la aprobación de la “reforma de las reformas”. Rodrigo Maia (DEM) dijo el domingo que estaba votando por Bolsonaro "con convicción", y que tras los comicios el Congreso debe trabajar "a todo vapor". Evidentemente, por la aprobación de este brutal ataque que hará que los trabajadores estén obligados a trabajar hasta morir.
Este lunes el electo presidente concedió la primero entrevista a la televisión en TV Record, de su más fiel aliado Edir Macedo, que fomentó una campaña pro-Bolsonaro. En esta entrevista, Bolsonaro afirmó que se iba a encontrar para conversar con Temer, para que pudieran juntos iniciar ya la aprobación de parte de la reforma previsional.
"La semana que viene estaremos en Brasilia e intentaremos junto al actual gobierno de Michel Temer aprobar algo. Si no es toda reforma previsional, al menos parte, para tratar de evitar problemas para un futuro gobierno", dijo Bolsonaro. Está clara la alianza indisoluble de Bolsonaro con los intereses de los capitalistas que piden la aprobación de la reforma de pensiones ahora, además de que eso le permitiría al su futuro gobierno tener "libertad" para aplicar otros ataques, que que sin embargo cuentan con el 44 % de rechazo de la población .
El jefe de Gabinete, Eliseu Padilha, que organiza la transición del gobierno de Temer a Bolsonaro, afirmó que la reunión entre ellos ocurrirá esta semana, contando con la participación de Onyx Lorenzoni (DEM-RJ), oficialmente elegido por Bolsónaro como presidente de la Casa Civil (jefatura de gabinete). El domingo, después de la votación, el general Mourao había dicho que iba a aprobar lo más pronto posible reforma previsional: "Luna de miel es corta" , en referencia al tiempo de “calma” entre Bolsonaro y la población, especialmente sus electores.
En esta entrevista con SBT (Sistema Brasileño de Televisión), Bolsonaro dijo "Mira, nuestra reforma [de las jubilación] es un poco diferente a la de Temer. Pero vamos a buscar el gobierno y salvar algo de esta reforma.” pero agregó que “tenemos que ver lo que puede pasar a la Cámara de Diputados y el Senado. Ahora que nosotros no podemos aprobar nada este año, ella es bienvenida y será hecho con discreción y responsabilidad".
Es más claro que nunca que las elecciones son la continuidad del golpe institucional de 2016, que posibilitó el avance de la extrema derecha y ataques brutales contra los trabajadores. Bolsonaro es la continuidad aún más autoritaria de los planes que aplicó Temer. Es una profundización del golpe y llevará adelante, ahora de forma aún más violenta usando "la elección por vías democráticas" como herramienta para aplicar los planes de ajuste en los que Temer fracasó.
Su proyecto de gobierno ultra neoliberal, parcialmente oculto durante su campaña, ahora toma forma a través de alianzas con partidos, diálogo con alas del golpismo, para aplicar los ataques pedidos por los empresarios para que ellos mantengan sus ganancias y que la cuenta de la crisis sea pagada por el trabajador.
Es urgente que las centrales sindicales, especialmente la CUT y la CTB, rompan de una vez por todas con su inmovilismo traidor, que trabó las luchas en 2017, dejando el camino libre para que la reforma laboral y la tercerización irrestricta fueran aprobadas, acabando con derechos logrados a través de la lucha histórica.
La estrategia de "oposición parlamentaria" dócil del PT, continuidad de la fracasada estrategia electoralista, es absolutamente impotente para frenar los ajustes de Bolsonaro, así como lo fue para frenar la reforma laboral de Temer. Dirigiendo la CUT, contuvo la lucha de los trabajadores.
Es urgente convocar y masificar comités de base en cada lugar de trabajo para organizar la lucha contra la reforma previsional y los ataques de Bolsonaro. Es a través de la lucha de los trabajadores y la juventud en sus lugares de trabajo y estudio, recuperando los sindicatos de las manos de la burocracia y hacerlos verdaderos instrumentos de organizaciónque será posible combatir el avance de Bolsonaro y la continuidad violenta de las reformas del gobierno golpista de Temer.