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Red Internacional
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Opinion. ¿El peronismo universitario de la UNCuyo apoya a Trump?

En su revista, la Agrupación Universitaria Nacional (AUN) de la UNCuyo, sumo a su "muro" de admirados al presidente de la principal potencia mundial, Donald Trump

Sábado 18 de febrero de 2017 18:06

Junto con la del Papa Francisco, el presidente de la principal potencia mundial, Donald Trump, valga enfatizar, un multimillonario, misógino y xenófobo, es la nueva figura que el peronismo universitario sumó al “muro” de admirados.

En la revista de AUN, dejan en evidencia la simpatía con las medidas de corte nacionalista y proteccionista. Afirman que será gracias a Trump, que los países oprimidos de Latinoamérica y el mundo encontrarán una salida o en sus palabras, “una posibilidad para respirar”.

Las políticas de Trump calaron en el posicionamiento de las agrupaciones peronistas, pues como expresan en sus notas, vieron en el magnate la respuesta a todos los males, planteando que Trump será “el personaje que dará batalla contra el “establishment” y la dictadura financiera de los bancos, e impulsará la industrialización y la generación de puestos de trabajo”.

El fervor nacionalista y la estrategia de alianza con las burguesías nacionales, que caracteriza a las agrupaciones peronistas, los hizo caer en la trampa de buscar en las medidas económicas de Trump, respuestas a la crisis laboral estadounidense; pues nada dicen de las terribles condiciones a las que se ven sometidos los trabajadores de México, olvidando que también son latinoamericanos, y el mundo por las multinacionales de origen yanqui. Ya vimos que las “amenazas” del magnate estadounidense a la Ford, General Motors, Carrier ,entre otros, para relocalizar su producción en Estados Unidos, son parte de un discurso cargado de demagogia en donde priman los convenios millonarios con las multinacionales que nada aseguraron, la ultraflexibilización laboral ylos acuerdos internacionales hechos y deshechos en pos de la ganancia de los empresarios y el capital financiero internacional, como sucedió esta semana con la “ fenomenal” reforma impositiva, anunciada por Trump, que disparó los valores de la bolsa de Wall Street. No es difícil ver, que en todo este entramado de intereses, el futuro de los trabajadores, las mujeres y los jóvenes de México y el mundo, si de Trump y las empresas depende, queda a la deriva.

En otra de sus notas sostienen que “cuando los países centrales se cierran sobre sí mismos, los latinoamericanos tenemos una posibilidad de respirar. La historia así lo demuestra, están tan concentrados en resolver sus problemas que aflojan los lazos de sometimiento hacia la periferia. Lamentablemente nos encuentra con la CEOcracia y el burro bailarín en la Rosada. Pero, si Trump sale del esquema de Tratados de Libre Comercio, pone en tela de juicio el poderío de la FED y de los bancos y realiza otras medidas de este estilo podría debilitar a los Macri, a los Temer, al golpe suave que se está gestando en Venezuela y más. Quizás son sólo supuestos, pero parece un rayo en la noche serena”.

Las agrupaciones peronistas, parecen olvidar el carácter imperialista de Estados Unidos, protagonista en los avatares de una economía internacional en la que hay 6 personas que tienen la misma riqueza que la mitad más pobre del mundo

¿Es posible apoyar a Trump como el “buen mal” para los latinoamericanos y los países oprimidos? ¿Realmente se puede opinar que Trump, el presidente del imperio (¡!), mirará su propio ombligo y dejará el camino libre para que el resto se las “arregle” como pueda? Los lemas que levantan como “Malvinas volveremos”, “Integración latinoamericana” quedaron en el cajón de los recuerdos y las agrupaciones peronistas con una ceguera cínica ante la realidad. Trump es el que hoy construye kilómetros de muros, refuerza las políticas xenófobas para deportar a millones, ataca a los derechos de las mujeres y se pone a tono con el fortalecimiento de la derecha a nivel mundial junto con Le pen y Putin. Ya vemos en sus primeros meses de gobierno, las críticas al vicepresidente de Venezuela acusándolo de narcotraficante y las restricciones a 7 países con orígenes musulmanes. Por si quedaba alguna duda de que Trump es el que dirige el imperio, a fuerza de sangre, ya hizo sus primeros ataques militares en Yemen asesinando a 16 civiles. Solo es cuestión de echar un vistazo al gabinete “ trumpniano”: veteranos de las guerras de Irak, negacionistas del calentamiento global como su ministro de ambiente, Rex Tillerson, el exdirector ejecutivo de Exxon Mobile (una de las mayores petroleras del mundo con intervención en toda Latinoamérica y Medio Oriente), entre otros ex CEOS.

En el marco de una crisis de hegemonía del poderío de Estados Unidos a nivel mundial y la crisis mundial desatada luego del 2008, Trump pondrá en pie un gobierno hegemonizado por el ala derecha de la burguesía. Claro que Hillary y el Partido Demócrata, nada tenían para ofrecer a los millones de trabajadores y sectores medios empobrecidos y no se posicionarían muy diferente ante las presiones del escenario mundial. Las agrupaciones peronistas, parecen olvidar el carácter imperialista de Estados Unidos, protagonista en los avatares de una economía internacional en la que hay 6 personas que tienen la misma riqueza que la mitad más pobre del mundo, se olvidan de los miles de muertos en Medio Oriente producto de sus políticas militaristas y de los capitales buitres que se asientan en los países semicoloniales.

Nos preguntamos ¿Se puede ser opositor a Macri, o el “burro bailarin” como lo nombran, apoyando a Trump? Hace unos días vimos a Macri apurado por tener una reunión con Trump; próximamente la Franja Morada, le agradecerá a las agrupaciones peronistas su posición.

Su revista es una oda a las políticas de Trump; confían más en los acuerdos que está haciendo Trump con las multinacionales, que en la fuerza de los de abajo, los que realmente se plantan para enfrentar a la derecha en Estados Unidos y el mundo, afirmando que “en sintonía, cientos de marchas y protestas se realizan en las principales ciudades de los EEUU, por cuarto día consecutivo. Y es que el plan de los bancos, a pesar del resultado electoral, es que asuma Hillary. Universitarios, sectores de clase media acomodada, y todos aquellos que son beneficiarios de las migajas de las bolsas, las tasas de intereses y de las delicateses del sistema financiero, asisten a esas marchas”.

Los movimientos Black Lives Matter, el movimiento por el salario mínimo y las huelgas de los fast foods y las cadenas de supermercados, el movimiento Occupy Wall Street y el movimiento No Global, fueron la antesala para demostrar que no será tan fácil atacar los derechos de las mujeres, los jóvenes precarizados, las minorías afroamericanas y los inmigrantes. Hoy cientos de miles de jóvenes, trabajadores y estudiantes salen a las calles o toman los campus universitarios, para decir que no van a permitir deportaciones de inmigrantes indocumentados y que van a resistir.

Las mujeres se pusieron en pie de guerra y en un día histórico llenaron las calles de Estados Unidos y todo el mundo, logrando llamar al primer paro internacional de mujeres de la historia para este 8 de marzo ¿Las agrupaciones peronistas convocarán? vemos que no es casual, que siendo el centro de estudiantes de la FCPyS no solo no convoquen, sino que estén ausentes o hagan una presencia formal en cada marcha por “NiUnaMenos”.

Hoy más que nunca es necesario levantar las banderas contra el imperialismo y el sistema capitalista, para construir una alternativa independiente, revolucionaria e internacionalista que unifique la fuerza de los explotados y oprimidos en Estados Unidos y todo el mundo, para darle así, una salida de fondo a la crisis en curso. En la Universidad está el primer desafío, ya que como la historia lo ha demostrado en grandes acontecimientos como el Mayo Francés y el Cordobazo la fuerza del movimiento estudiantil junto con los trabajadores y los sectores oprimidos, será lo que pondrá en jaque a las clases dominantes.