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Red Internacional
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La Matanza. Escándalo: bomberos voluntarios de La Matanza deben vender su cuartel por una deuda millonaria

Los bomberos voluntarios de La Matanza pusieron en venta su histórico cuartel (central) por no poder pagar una millonaria deuda. La intendencia de Fernando Espinoza no da respuesta ante la grave situación.

Jueves 2 de julio de 2020 14:52

Los bomberos en su cuartel de Ramos Mejía, que tuvieron que poner en venta ante el desfinanciamiento estatal

Los bomberos en su cuartel de Ramos Mejía, que tuvieron que poner en venta ante el desfinanciamiento estatal

De esta manera tan estremecedora los bomberos voluntarios de La Matanza dieron a conocer que pondrían en venta su cuartel central ubicado en Ramos Mejía y que funciona desde 1946 a causa de una deuda de 130 millones de pesos con el AFIP, con el sindicato Utedyc y también a empresas de servicios.

Cómo podemos ver en el video, que fue subido a su red oficial, también se denuncia las condiciones en las que se encuentran los equipos hace años, el presidente de bomberos voluntarios de La Matanza hace responsables directamente a las autoridades nacionales y municipales y hace un llamado a la conciencia diciendo "que el Estado se de cuenta de una vez por todas la labor que hacemos los bomberos voluntarios de todo el país".

Gustavo Cid afirmó en una entrevista para un medio de comunicación: "Nosotros tenemos una deuda millonaria principalmente con la AFIP, entonces es inviable que con donaciones de la gente podamos saldar esa deuda. Desde el año pasado venimos trabajando en un proyecto de ordenanza pero desde el Municipio de La Matanza no pueden cumplir con la aprobación de la ordenanza que permite a los bomberos subsistir." Además asegura que "el pedido puntual es para una quita de la deuda de AFIP. Así como se hizo en el caso de otras empresas privadas, con más razón en este caso que se trata de una entidad de bien público.

Es necesaria una respuesta de parte de las autoridades provinciales y municipales

La responsabilidad apunta hacía el gobernador de la provincia Axel Kicillof, la intendencia de Fernando Espinoza que anteriormente estaba en manos de la hoy vicegobernadora Magario. Los trabajadores denuncian desfinanciamiento desde hace años, ya que no sólo su deuda comienza en 1990 y va en aumento sino que también han hecho malabares para garantizar su servicio. La realidad es que gran parte de los equipos están fuera de mantenimiento y cuentan con escasos recursos para los 6 cuarteles distribuidos en el partido más poblado del conurbano bonaerense. Los elementos de protección personal de los bomberos están totalmente vencidos y tienen once años usando los mismos equipos estructurales cuando, por norma, no los podes usar más de dos años. El aporte municipal está atrasado y eso dificulta el pago de los sueldos a los empleados que atienden radios, teléfonos y derivan a emergencias.

La situación es realmente indignante, al escuchar el relato y la denuncia de los bomberos no se comprende cómo el Estado es capás de financiar y ayudar a entidades incluso millonarias que dicen estar en crisis pero para las dotaciones de bomberos voluntarios que siempre cumplieron un rol esencial para la comunidad no se destina un solo recurso, una vez más una muestra brutal del desprecio hacia la vida y el esfuerzo de los trabajadores esenciales.

A La Izquierda Diario llegan cientos de denuncias todos los días de trabajadores que se ven expuestos no solo al contagio sino al odio de las patronales y el abandono por parte de sus sindicatos, viendo sus salarios afectados y sus derechos pisoteados. Creemos que bajo ningún punto de vista los bomberos voluntarios deberían haber llegado hasta esta instancia de tener que vender el cuartel por tener una deuda con un organismo del Estado.

Mientras la provincia y la nación destinan millones al pago de la deuda externa para los trabajadores esenciales, para la salud, vivienda y trabajo no se destina un solo recurso, aún en contexto de pandemia!
Es necesario y urgente exigir un impuesto a las fortunas para que de una vez por todas se inviertan las prioridades!