La manifestación encabezada por la directiva del SOEAIL de la que fueron parte delegados azucareros, despedidos y mujeres, UATRE seccional 877, desocupados de TOrRe, el PTS - FITU, referentes de CTA, CEDEMS y SEOM, y los diputados de la izquierda, Vilca y López, llegó hasta el frente de la administración del ingenio y la Casa Rosada.
Lunes 3 de marzo 10:32
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El viernes pasado se realizó la marcha contra los 165 despidos del Ingenio Ledesma y por el cumplimiento de la cláusula de revisión paritaria 2024, partió del Monumento al Zafrero, con la columna de la Directiva Sindical, delegados, despedidos y trabajadores despedidos del SOEAIL a la cabeza, acompañadas por las organizaciones solidarias, la UATRE seccional 877, la organización de desocupados TOrRe, el PTS – FITU, mujeres y referentes de la CTA, CEDEMS y CCC. La movilización recorrió las principales arterias del ejido urbano de Libertador hasta llegar al frente de la administración y la Casa Rosada de Ledesma SAAI, haciendo solo dos breves paradas en las afueras del Concejo Deliberante, donde se les exigió desde la Directiva Sindical un pronunciamiento a los concejales sobre los despidos. En acceso sur a Libertador, frente a la casilla de turismo y estación de servicios Axion, a pocos metros había un operativo policial de infantería y grupos especiales antimotines que ordenó el gobierno de Sadir y su ministro de seguridad Corro para intentar amedrentar la movilización obrera y reprimir cualquier intento de manifestarse en la Ruta Nacional 34.
La manifestación obrera, que movilizó alrededor de 300 personas, llegó al barrio Ledesma de Libertador, donde está emplazado el complejo agroindustrial Ledesma, cantando “si no los reincorporan, que quilombo se va armar”. Y ya frente a la administración del ingenio y “La Rosadita” tomaron la palabra el secretario general del SOEAIL, Luciano Lezano, los delegados azucareros Pablo Lazarte, Daniel Nina y Mariano Soria, el secretario general de UATRE 877, Benjamín Ramírez, el diputado nacional por el PTS-FITU, Alejandro Vilca, el pro secretario gremial del CEDEMS, Andrés García, el referente de CTA y ATE, Matías Brizuela, la concejera estudiantil del IES N°10, Karen Torres, el diputado provincial por el PTS FITU, Miguel López, y la referente de la organización de desocupados TOrRe, Alejandra Matías.
Una mujer, pareja de un trabajador despedido, dijo: “Salgo a marchar porque estoy cansada que la empresa golpeé a mi marido, que lo ha despedido, como también a algunos de sus compañeros, cuando muchos de ellos hicieron el esfuerzo de no faltar e incluso fueron enfermos a trabajar y las familias no sabíamos si nos iban a devolver a nuestros esposos en un cajón. Estos días tuvimos la incertidumbre de no saber a quién más le llegaría el despido. Para que frenen estos despidos tenemos que salir todos a las calles, porque la empresa Ledesma con apoyo de los gobiernos, va a querer hacernos comer tierra y no podemos permitírselo”.
Luciano Lezano, secretario general del SOEAIL, puntualizó que, “el próximo jueves vamos a ir a la conciliación obligatoria que dictó la Secretaria de Trabajo, pero ahí vamos a pedir que se retrotraigan los despidos, aunque sabemos que vamos concretar esto solo si seguimos en lucha, porque lo que buscan con estos despidos es estigmatizar la lucha obrera, disciplinarnos para que no reclamemos más salarios y sigamos siendo un pueblo pobre, con trabajadores pobres, cuando trabajamos para una empresa multimillonaria”.
El delegado azucarero Mariano Soria sostuvo que, “la movilización y olla popular son un primer paso, tenemos que fortalecer con la coordinación, haciendo un encuentro unitario con los compañeros del Ingenio Tabacal, donde despidieron a 24 obreros y contestaron con huelga y cortes de ruta. Porque si las patronales azucareras se unen para atacarnos con despidos en simultáneo, nosotros, los trabajadores y el pueblo pobre, también tenemos que unirnos para luchar juntos por reincorporación de los despedidos, por una actualización salarial que saque a las familias obreras de la pobreza y por derrotar este intento de las patronales azucareras de aplicarnos de hecho la Reforma Laboral y la Ley Bases de Milei y compañía, que les sirven para intentar disciplinar de cara a las paritarias 2025 y más de fondo, para profundizar la precarización del empleo de los jóvenes, porque planifican a cuenta de los despedidos, tomar trabajadores eventuales y tercerizados para abaratar costos laborales y debilitar al sindicato, no se lo podemos permitir”.
La jornada de lucha contra los despidos de Ledesma concluyó con un almuerzo que tuvo por menú un estofado de pollo con arroz que cocinaron mujeres de la organización de desocupados TOrRe junto con obreros azucareros del SOEAIL. Muchos de los trabajadores que salieron de la fábrica se sumaron al almuerzo como modo de ser parte de la lucha de sus compañeros despedidos y del sindicato. Así empezaron a calentar motores los azucareros y sus familias para una lucha en la que hay que proponerse hacer de la misma, una causa popular a defender junto a toda la comunidad, ya que los despidos afectan a todo el pueblo, no solo al obrero despedido y a su familia, sino a las despensas, verdulerías, carnicerías, librerías, tiendas y ferias, porque son los trabajadores azucareros los que dejan sus ingresos salariales en la economía de la región.
La patronal, que declaró ganancias de $40.000 millones en 2024, invirtió 6 millones de dólares en un nuevo trapiche y otros 6 millones de dólares en una fábrica de vajillas descartables biodegradables, y se benefició de la reducción de retenciones a exportadores del campo que decretó la presidencia de Milei, no deja un peso, ya que embolsa sus ganancias y se la gasta en sus lujos, yates, consumo suntuoso como piezas de arte para sus colecciones y mansiones o la depositan en paraísos fiscales para tributar menos impuestos en el país y la provincia, porque en las localidades azucareras ni siquiera tributan tasas o canon municipales, por más que sean los que más tierras concentran y explotan.