Aniversario. Inundación de La Plata: 11 años de un crimen social que sigue impune

Cada vez que llueve en La Plata, los habitantes se ponen en alerta. Entre el 2 y el 3 de abril de 2013 la capital de la provincia de Buenos Aires sufrió una de las peores inundaciones de su historia. En pocas horas cayeron 400 milímetros de agua. Todo colapsó. Casas arrasadas, al menos 89 personas muertas.

El peronismo Del Frente para la Victoria llevaba años gobernando en el país, en la provincia de Buenos Aires y en la ciudad cuando se desató la inundación. Desde la gobernación de Daniel Scioli (peronista devenido en libertario) se fraguó el número de fallecidos con un entramado policial y judicial para falsificar documentos y ocultar cuerpos.

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Gracias a la lucha de familiares de víctimas y las asambleas de inundados que se conformaron en todos los barrios y las organizaciones que denunciaban el crimen social, se llevó a cabo un juicio en marzo de 2019. Los únicos acusados fueron Sergio Ariel Lezana, director de Defensa Civil Municipal y el responsable a nivel provincial Miguel Ángel Lorenzo. La sentencia judicial fue un canto a la impunidad: Lorenzo falleció un mes antes y sólo Lezana fue condenado por el delito de "incumplimiento de los deberes de funcionario público", recibiendo una irrisoria multa de $12.500 y un año de inhabilitación para ejercer cargos públicos. No pasaron por el banquillo otros funcionarios: muchos menos Scioli, ni el intendente Pablo Bruera ni ninguno de los ministros.

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En este informe, denunciamos que las consecuencias de la inundación de 2013 no eran culpa de "la naturaleza”, sino de “una política deliberada para privilegiar a las corporaciones constructoras e inmobiliarias en detrimento de la calidad de vida de la población”. Desde Julio Alak, hoy nuevamnte intendente de la ciudad, que jugó un rol clave en la aprobación del Código de Planeamiento Urbano y permitió el desenfrado crecimiento inmobiliario, pasando por el peronista Pablo Bruera hasta el macrista Julio Garro; todos responsables de que cada gota que cae, la ciudad colapse en minutos.

La ausencia de obras de infraestructura que, pese al paso de los años, deja a la región librada a su suerte ante nuevas tormentas feroces. Falta con recordar las últimas lluvias de hace semanas atrás donde se veían autos flotando, casas inundadas y ningún plan de contingencia por parte de los gobiernos municipal y provincial.

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Como siempre lo han denunciado la izquierda y diversas organizaciones barriales, ambientales y sociales, la tormenta puede ser un fenómeno natural, pero sus consecuencias sociales no. Todos los gobiernos que han pasado en estos años, tanto a nivel nacional, provincial como municipal, son responsables directos de la ausencia de prevención del impacto social de estos eventos climatológicos, especialmente sobre poblaciones cada vez más empobrecidas.

No vamos a naturalizar que con cada lluvia miles de familias pierdan todo.
Nuestra ciudad además tiene la mayor cantidad de barrios precarios sin ningún servicio.
La plata para infraestructura está, pero el gobernador Kicillof la destina a pagar una deuda completamente usurera pic.twitter.com/tUhGPCzTmg

— Luana Simioni (@LuanaSimioni) March 20, 2024

Como todos los años, asambleas de inundados de la ciudad convocan a una movilización bajo la consigna "La Plata no olvida", desde las 16 hs. en Plaza Moreno.